viernes, 24 de octubre de 2025

Album 30 aniversario



En 1997, cuando pasábamos la entrevista de asilo en la embajada norteamericana en Madrid lo único que puso en duda nuestra interrogadora fue nuestro casamiento, ejecutado cuatro días antes de salir del país. Así lo cuento en “Siempre nos quedará Madrid”:


“En la embajada todo fue bien hasta que la entrevistadora ―una mujer de rasgos latinos y acento indeterminado― nos dijo que le llamaba la atención que nos hubiéramos casado tan sólo cuatro días antes de nuestra salida de Cuba. La única evidencia que teníamos contra la sospechosa fecha del matrimonio era nuestro álbum de fotos cubanas en el que aparecíamos en todos los avatares que habíamos atravesado en los últimos cinco años: con la melena de león africano (al cortármela había alcanzado para rellenar el cojín que Cleo ponía entre ella y la parrilla de la bicicleta); trasquilados los dos tras una epidemia de piojos que contrajimos en un hotel de provincias; rodeando casi siempre a recién casados porque en aquellos días era difícil conseguir una fotografía sin que hubiera una boda por medio. Y todas las fotos distintas entre sí en textura, colores y papel como si fuesen retratos hechos a mano por pintores diferentes. La distancia tecnológica entra cada una de las cámaras con que habían sido sacadas resumían la evolución de la fotografía desde fines del siglo XIX hasta la última década del siguiente, desde aquellas cámaras de cajón que ofrecían imágenes turbias a orillas del capitolio habanero hasta los aparatos más o menos sofisticados de amigos extranjeros. Un muestrario fuera del alcance de cualquier falsificación”.


Ahora sería mucho más fácil convencer a nuestra entrevistadora de 1997 con un teléfono a mano mostrándole este álbum. Y la verdad es que a aquella boda no le dimos mucha importancia ni siquiera los implicados directos. Apenas era un trámite más entre los muchos que tuvimos que hacer en los últimos meses en Cuba. Sabiendo que no nos darían permiso para salir estando casados no pasamos por el trámite del matrimonio hasta no recibir los respectivos de salida. Por eso la fecha y el aniversario nunca han sido relevantes para nosotros y lo calculamos por haber sido cuatro días antes de nuestra salida de Cuba. Esa fecha si la tenemos clarísima.













No hay comentarios: