miércoles, 31 de marzo de 2010

Respuesta

RESPUESTA A SILVIO RODRÍGUEZ

Carlos Alberto Montaner

El cantautor Silvio Rodríguez me ha hecho una pregunta públicamente. Se la voy a responder. Es un magnífico y admirado compositor al que debe tomársele en cuenta. Dice Silvio: “Si los miles de cubanos que perdimos familia en atentados de la CIA hiciéramos una carta denuncia ¿la firmaría Carlos Alberto Montaner?”. La pregunta forma parte de lo que parece ser un poema o la letra de una canción inédita. El texto se titula Preguntas de un trovador que sueña y está disponible en un website llamado kaosenlared.net, vertedero ideológico en el que es posible leer elogios a los narcoterroristas de las FARC o a los asesinos de ETA, pero donde, de vez en cuando, aparecen críticas lúcidas a la dictadura cubana.

Por supuesto, Silvio: yo firmaría esa denuncia. La CIA, como todos los servicios de inteligencia, ha hecho cosas deplorables que merecen ser censuradas. Y las ha hecho el ejército norteamericano cuando maltrató cruelmente a los prisioneros. Y las sigue haciendo el Departamento de Justicia de Estados Unidos, y hasta la Corte Suprema, cuando priva a ciertos detenidos del amparo de la ley. Todo eso, incluida la pena de muerte, me parece abominable y contrario a un verdadero Estado de Derecho en el que se respeten las libertades individuales.

Ahora, Silvio, me toca preguntarte a ti: ¿firmarías una carta en la que se denunciaran los atropellos a los presos políticos cubanos y el acoso a las Damas de Blanco? Una carta en la que mostraríamos nuestro respeto por Orlando Zapata Tamayo, Guillermo Fariñas y todo aquel dispuesto a morir defendiendo su dignidad de ser humano. Una carta en la que solicitaríamos la condena a los policías responsables de la muerte de 41 infelices, la mayor parte niños y mujeres, que huían de Cuba en un barco en la madrugada del 13 de julio de 1994. Una carta en la que los cubanos les pediríamos perdón a los somalíes por la matanza de miles de personas llevada a cabo en 1977 y 78 por el ejército cubano en la Guerra de Ogadén, cuando Cuba se alió a la dictadura etíope. Una carta en la que se condenara la censura, el dogmatismo, el partido único, la persecución a las personas por tratar de defender sus ideas políticas, sus creencias religiosas, sus preferencias sexuales. Una carta en la que les dijéramos a los hermanos Castro que 51 años es un periodo demasiado prolongado para continuar imponiéndoles a los cubanos un sistema fallido y cruel en el que ya casi nadie cree, comenzando por ti, Silvio, y por tu talentoso hijo “Silvito”, músico, como tú, a quien apodan “el Libre” para diferenciarlos, porque Silvito ha decidido cantar y decir lo que piensa.

Voy a contestar por ti, Silvio: yo creo que la firmarías. Y creo que la firmaría el 90% de los cubanos, hartos ya de esa vieja dictadura de difuntos y flores. Y te diría más: es importante que todos los cubanos interesados en salvar el futuro (porque el pasado lo hemos hecho añicos irremediablemente), los de la oposición democrática y los reformistas del régimen, como es tu caso, se encuentren en un punto medio para buscar una salida a la trampa que nos van a legar los hermanos Castro cuando decidan morirse y nos dejen como herencia un manicomio empobrecido y sin ilusiones patrullado por una legión de policías corruptos.

Hace pocas fechas dijiste que a la palabra “revolución” hay que quitarle la “r” para comenzar a evolucionar. De acuerdo. ¿Cómo se hace ese prodigio? Se hace vaciando las cárceles de presos políticos, permitiendo la libre expresión de las ideas y la asociación espontánea y sin coacciones de las personas. No se trata de determinar ahora hacia dónde debe ir el país. Lo que se impone en este momento es abrir los cauces de participación para que los propios cubanos cambien todo lo que haya que cambiar y decidan democráticamente el rumbo que debe seguirse. Después, poco a poco, sin violencia, sin revanchas, pacíficamente, elección tras elección, las piezas irán cayendo en su lugar hasta que salgamos de la etapa actual y la sociedad, si así lo decide libremente, redefina el Estado y el perfil de la convivencia.

¿Hacemos esa carta juntos? Atrévete.

Nota: Carta enviada por el autor, con el ruego de su difusión inmediata.

6 comentarios:

BARBARITO dijo...

La carta de Carlos Alberto Montaner: ¡¡Brillante!!
...a ver si Silvio Rodriguez tiene lo que hay que tener para responderle abiertamente

Anónimo dijo...

Magnífica como siempre la intervención de Carlos Alberto.

Me gustó mucho la diatriba de Patterson contra Silvio en el programa "A Mano limpia" donde le dice abiertamente a Silvio "sabandija."

Saludos, Jacobo

Engler dijo...

Está claro que Montaner no entendió una sola letra de lo que Silvio pregunta. Mejor dicho, lo que no pregunta. O talvez si lo entendió y como suele pasar con las personas dogmáticas de todo el crisol ideológico visible, se van pòr las ramas.

Básicamente, lo que Silvio quiere saber, es: ¿Por qué solo firmas cartas contra Cuba y ni una sola palabra contra lo que pasea o se hace en el resto del mundo, la CIA por ejemplo? Desde luego que si elaboras un discurso desde la repetición salen coherentes y elocuentísimas cartas de respuesta. Su respuesta, "Claro las firmaría" merecería otra pregunta "Por qué no lo ha hecho"

Ojo que no defiendo a nadie, simplemente soy un observador en este mundo y me da tanta rabia que los mecanismos diseñados para formar eso que llaman "Opinión Pública" en donde vivo, Guatemala, como en todas partes del mundo, según puedo entender con lo que leo, sean entes controlados y con intenciones no siempre claras y que se venden como paladines y dueños de las verdades más absolutas.

Saludos,

apenao dijo...

Esa respuesta de CAM sabe como el jaque previo al jaque mate. No hay forma que el “unicornio rojiverde” (ojo nada de azul) pueda formular una respuesta decente a la respuesta de “Manos de piedra” Montaner.

Ma. Acapulco dijo...

Es pelea de leon contra mono y el mono amarrado. El mono es Silvio, el pobre, que tiene que decir una cosa un dia y al otro hacer un poema incomprensible para limpiarse.
Lo jodio CAM con esa carta. Porque es una carta de amor y no de desamor. Y es sabido que defenderse de el ataque es mas facil que defenderse de un abrazo.
Sencillamente genial, una carta que suma y resta.

Anónimo dijo...

en buen cubano (habanero)...pol la caja'el pan