sábado, 28 de marzo de 2009

Sobre granos de arena

Me permito tomar un comentario de César Reynel Aguilera en un debate y sacarlo de contexto. Da igual a qué polémica concreta se esté refiriendo porque el profundo contexto de sus observaciones es el de toda la situación cubana y los esfuerzos por cambiarla e influir en ese cambio. Esfuerzos que muchas veces se contraponen como si olvidaran qué los llevó allí en primer lugar. Espero que me disculpes César pero sentía que tenía que decirlo y no he encontrado mejor modo de hacerlo que plagiándote:

En el contexto cubano casi todo es una nimiedad. Yo no creo que se pueda lograr algo contra los Castros sin asumir que cualquier cosa que llegue a suceder será el resultado, la sumatoria, de una enorme cantidad de nimiedades. Desde que Maxim inventó la ametralladora, Lenin la teoría de la revolución y Mussolini el control de los medios de difusión masiva, la lucha contra el totalitarismo se convirtió en —y todavía es— una empresa quijotesca, casi ridícula y condenada de antemano al fracaso. Cuando esa lucha es contra el totalitarismo de izquierda la posibilidad de éxito es cercana a cero. El “comunismo” se cae por autofagia económica y por implosión ideológica, el sistema se come la carne que heredó y que nunca alcanza reemplazar, después de eso sólo queda un andamio ideológico, duro como el hueso (porque descansa en necesidades humanas tan ancestrales como el mito y la “bondad”) que sólo es vulnerable en unas coyunturas (articulaciones) que están siempre cambiando de lugar y fortaleza. Dar en el centro a esos puntos vulnerables y caleidoscópicos es una empresa de gigantes. No hay estrategia puntual, no existe el francotirador, Nemrod, arquero persa, intelectual, líder, o como se le quiera llamar, que pueda hacerlo o decirnos como se hace. La única forma de lograrlo es a través de la vieja teoría de los grandes números: tira mucho, y reza. Cada disparo, sin embargo, es un acto tan cercano a la ridiculez que la inmensa mayoría de los mortales renuncian a hacerlo. Yo te aseguro que en estos momentos en Villa Marista, o en cualquiera de los centros de torturas del castrismo, hay un esbirro diciéndole a un prisionero: “Nada pasa, nadie te oye. Tu esfuerzo es nimio y ridículo, la única explicación lógica de que quieras hacer algo como lo que estás haciendo es tu delirio protagónico”. La metáfora del granito de arena es mucho más literal de lo estamos dispuestos a creer, que cada cual ponga el suyo sin pensar que el que pone otro es una piedra en su zapato, para piedras ya bastante tenemos con los infiltrados castristas, ¿qué sentido tiene “encontrarlas”, sentirlas, donde no las hay?
César Reynel Aguilera

5 comentarios:

Armando Tejuca dijo...

El problema del granito de arena esta en que desgraciadamente casi siempre ese granito tiene su origen en el castrismo, ya del lado de acá trabajará con los mismos métodos y casi el mismo lenguaje. Tratándose de hacer un activismo en contra pero aprendido dentro del castrismo estamos muy mal, los activista que se oponen al castrismo son desertores casi siempre, tipos morosos, vagos, liberales que no pudieron permanecer en la lucha izquierdosa y una vez virados pues transportan esa misma dosis de vagancia. No creo que necesitemos activistas nacidos en la derecha, ni pediría mas esfuerzo y sacrificio a los que ya tenemos, solo me gustaría cambiar de táctica y aprender mas de leyes de mercado, no tenerle tanto miedo al pago y al cobro, mas Leopardi y menos analistas políticos, sumar mas y mas cubanos a la morosidad, a la apatía hacia el discurso tentador de la izquierda, mas cubanos que busquen dinero, capital, bienes, demostrarles la virtud del atrevimiento, de la intrepidez, de la no necesidad del ministerio de cultura.

Armando Tejuca dijo...

ah, me incluyo entre los granos de arena que provienen de la izquierda, pues 33 años viviendo alli y nacer alli fue demasiado. uf, demasiado...

Anónimo dijo...

Enrique,

No hay tal plagio, me citas, y es un honor.

Armando,

tienes razón, el problema es que, como tú bien dices, todos tenemos algo del castrismo.

Saludos

CRA

Güicho dijo...

Este plagio te quedó salvaje, Tigre, digo, a CRA. Vaya, es para asentir cavilando sin nada que agregar.

¡Coño, y el Tju acaba de definir la morosidad cívica!

Saludos a los tres

Omar dijo...

A mi me encantaria que hubiera mas activistas de derecha. Pero de una derecha leal a la nacion, no una que primero se mire a sus bolsillos y despues al interes nacional. Pero tal cosa es un oximoron. La derecha, casi que por definicion, es asunto de unos pocos para unos pocos y no importa si para eso tienen que vender el pais. Es tema complicado, miren a los italianos con su Berlusconi. Quizas sea porque la izquierda italiana se suicido.
Estan los liberales nacionalistas, a lo Osvaldo Paya. No esta mal.
A mi lo que me aungustia, lo que me corta el grito es la posibilidad de ser titeres de los yanquis. Esos que no nos respetan, ni nos respetaran nunca. Que hacer?
Como sacudirnos de la tirania y seguir siendo soberanos? Lo que hace al totalitarismo castrista una especie particularmente resilente entre los totalitarismos, no es solo su discurso de izquierdas sino su discurso nacionalista. Ambos venden muy bien fuera y dentro lo la isla. Ambos responden a necesidades de una buena parte de la humanidad, las mias incluidas.