El Conjunto Chapottín, heredero directo del Conjunto de Arsenio Rodríguez (este ultimo sale al principio del video) tocando una pieza de Benigno Echemendía (y no Arsenio como se afirma en youtube): “Camina y prende el fogón”. También les pongo versiones de la misma canción del portorriqueño Tito Gómez y de la Sonora Ponceña que estan igualmente buenas.
Blog personal y casi tan íntimo como una enfermedad venérea pensado también para liberar al pueblo cubano, aunque sea del aburrimiento. Contribuyentes: Enrisco (autor de “Obras encogidas” y “El Comandante ya tiene quien le escriba”), su alter ego, la joven promesa de más de cincuenta años, Enrique Del Risco. Espacio para compartir cosas, mías y ajenas, aunque prefiero que sean ajenas. Quedan invitados a hacer sus contribuciones, y si son en efectivo, pues mejor.
martes, 31 de julio de 2007
lunes, 30 de julio de 2007
Pablo de Cuba y Fermin Gabor
El otro día mientras firmaba libros en la Librería Universal se me acercó un muchacho con un ejemplar de “Leve Historia de Cuba”. Le pregunté que a nombre de quien quería que escribiera la dedicatoria y me dijo: “A nombre del repentista de Palmas y Cañas y pianista de restaurante de Miami”. Enseguida me aclaró que su nombre real era Pablo de Cuba, nombre al que en un post anterior me había referido como apropiado para un repentista o un pianista de restaurante. Sigo pensando lo mismo que dije en el post (que su crítica a Padilla estaba poco fundamentada, algo que por cierto, explicó mejor en un segundo artículo) pero me apenó un poco tener delante de mí a ese muchacho cortés en actitud nada beligerante despues de haberle endilgado esas comparaciones sobre su nombre de nacimiento que coincide para nuestra desgracia con el de nuestro pais natal. Por otro lado mi admirado Fermín Gabor, articulista de La Habana Elegante con un refinadísimo y punzante sentido del humor, acaba de meter baza en el debate de Padilla con un artículo. Si no conocen a Gabor les recomiendo leerse todo lo que encuentren en la sección La Lengua Suelta. Allí hay piezas antológicas como “Fornet e hijo reabren El Encanto” (#6), “Donde Rosita Fornés explica la punzada del guajiro” (#10) o “Fina y Cintio contra el Lechón Jiribilla” (#37). Últimamente sus artículos han perdido un poco de filo pero no quiero caer en especulaciones del tipo de que la sátira contra los escritores de adentro se le da mejor que contra los de fuera cuando puede tratarse simplemente de un simple ajuste de mirilla. Esperemos que pronto vuelva a las andadas con su exquisita mala leche.
Gusanos simples y complejos
He recibido un comentario sobre el tema de la BBG que amerita una explicación detenida. El comentario dice así: “¿Cortázar? ¿Nobás Valvo? ¿Arreola? Por favor que alguien me explique quienes son estos autores, para yo poder entender mejor esa biblioteca básica del gusano y, si es posible, irmela hasiendo poco a poco. Desen cuenta que todos los gusanos no tenemos el mismo nibel cultural.” Lo primero es que para ser gusano no hace falta leer ningún libro. Basta una galleta de un policía, un chivatazo del CDR, o las explicaciones que dan en el noticiero de por qué hay apagones para empezar a sospechar que hay algo podrido en el reino de Dinamarca. Y si necesitan un poco de ideología basta un catálogo de Home Depot o un menú de cualquier fonda de Miami. Estoy pensando en los otros gusanos, un poco más brutos, a los que una galleta de policía interprovincial no les es suficiente y necesitan leer para acabar de convencerse de algo bastante obvio. Para esos uno de sus grandes problemas era la dificultad de encontrar libros que satisfacieran su gusaneril curiosidad. No era fácil encontrar un libro abiertamente gusano en Cuba en los 80. En parte por la censura y persecución de esos libros y en parte porque en realidad nunca ha habido muchos. Oponerse a una dictadura de izquierdas nunca ha tenido buena prensa y esa es la mejor explicación de por qué se habla de resistencia antifascista y no de gusanería ñángara. Si un escritor como Mario Benedetti hubiera sido gusano no se le mencionaba ni en los centros espirituales. Por todo eso los gusanos retardaditos de los 80 –que si algo ha dado esa generación han sido lectores entre líneas- nos dedicábamos a buscar gusanerías en los lugares más insospechados, como podían serlo libros publicados por Casa de las Américas o por el mismísimo Instituto Cubano del Libro. Y así nos íbamos volviendo gourmets de la gusanería y buscábamos textos agudos, bien escritos y de ser posible hasta divertidos aunque no necesariamente transparentes. Por eso mencionaba a Arreola o Cortázar. Pero si de lo que se trata es de bajar el nivel cultural lo máximo posible muy bien podrían leerse a un tal Enrisco.
domingo, 29 de julio de 2007
Superávit: XXX años de éxitos
Un programa para la television cubana sobre el grupo Superavit, una especie de tomadura de pelo simulando ser un grupo famosisimo cuando todavia no habian grabado su primer disco. En palabras de alguien que no se si es el propio Raul Ciro: "Farsa. Programa de Cubavisión emitido una noche y a la mañana siguiente su director, René Arencibia, fue llamado a rendir cuentas..., no precisamente por las notables desafinaciones de la muestra, no... Sesión grabada en estéreo directo, en pésimas condiciones de referencia de escucha. El ampli del bajo, prestado por cierto, se apagaba de vez en cuando..., el violonchelo no se escuchaba bien... Aún el grupo no soñaba ni con negociar el futuro proyecto de grabación "Verde Melón". Tamaña valentía la de sus integrantes y la de René Arencibia al aceptar este reto..., qué remedio."
Segunda parte
Tercera Parte
Segunda parte
Tercera Parte
Antologia para la BBG
Se me ocurre ahora que se pudiera conformar una antología latinoamericana del cuento gusano (antitotalitario sería más elegante pero aquí no se trata de elegancia) para la cual tengo varios candidatos: “El prodigioso miligramo” de Juan José Arreola, “Con legítimo orgullo” de Julio Cortázar, “Aquella noche salieron los muertos” de Lino Novás Calvo, “Otra vez Luis Catorce” de Virgilio Piñera. De Borges, curiosamente, no me viene a la mente ninguno. ¿Se les ocurre otras propuestas?
sábado, 28 de julio de 2007
Y sigue la BBG de La Habana
Y hablando de la Biblioteca Básica del Gusano Duanel me recuerda “Los siervos” publicada primero por Ciclón, luego en internet por Cacharro(s) y más tarde por La Habana Elegante acompañada por un dossier. Es realmente un clásico de la BBG, lástima que hasta hace poco apenas fuera accesible. Se la recomiendo de todo corazón.
viernes, 27 de julio de 2007
Mañana sábado firmo libros en la librería Universal (Miami)
Quiero recordarles a los que están en Miami que mañana sábado 28 de julio tengo una firma de libros de Leve Historia de Cuba a las 12 del día en la librería Universal de la calle 8 esquina a la 31 avenida. Voy a estar hasta la 1:30pm. También pueden aprovechar para que les firme ejemplares de “El Comandante ya tiene quien le escriba” que todavía quedan. Nos vemos allá.
Biblioteca Básica del Gusano
Mientras vivíamos en Cuba sin saberlo ni ponernos de acuerdo íbamos conformando un ciclo de lecturas de lo que con el tiempo terminé llamando la Biblioteca Básica del Gusano. Eran libros, sobre todo de ficción, que retrataban de una manera inteligente y aguda y no exenta de humor los mecanismos del totalitarismo –o de una simple dictadura- y el absurdo de la vida en ese sistema. Libros que forrábamos con revistas soviéticas o páginas del Granma lo cual los hacía automáticamente sospechosos entre nosotros mismos y pasaban de mano en mano hasta que la avaricia de alguno interrumpía la cadena. Parte de esa biblioteca eran “1984” y “Rebelión en la granja” de Orwell, “Mea Cuba” de Cabrera Infante, casi todo Reinaldo Arenas, todo Kundera, todo Mrozek, casi todo Bulgakov, todo Solzhenitsin, algunos cuentos sueltos de Arreola o hasta del mismísimo Cortazar, cosas sueltas de Virgilio Piñera, el “Fuera de juego” de Heberto Padilla, los ensayos políticos de Octavio Paz. Eran libros que no sólo descubrían mecanismos que nos abrumaban y nos los hacían consciente. También nos decían que no estábamos tan solos. Que las llamadas regularidades del socialismo existían pero que eran en realidad una lista infinita de desastres y terrores que se repetían de un país a otro sin importar las diferencias culturales e históricas y en ese sentido los libros extranjeros eran aún más reveladores que los cubanos. Me imagino que se me olvidan muchos autores y títulos y otros que sencillamente ignoro. Me gustaría muchísimo que compartieran conmigo títulos y autores que conformaron esa BBG particular de cada uno de ustedes.
Otro de Mrozek
Slawomir Mrozek, un escritor polaco del que antes presenté el cuento “La Revolución” es un autor esencial de la BBG o Biblioteca Básica del Gusano. Este cuento, “El muñeco de nieve” es una buena y sucinta descripción del proceso –uno de ellos- que lo conduce a uno a la gusanería. Va dedicado a Garrincha.
EL MUÑECO DE NIEVE
Slawomir Mrozek
Está nevando este invierno cuanto se quiera y más, y los niños hicieron en la plaza del mercado un muñeco de nieve.
Es una plaza grande, por la que pasa multitud de gente todos los días. Dan a ella las ventanas de muchas oficinas de la administración pública, pero a la plaza no le preocupa eso; está sencillamente ahí. Con gran alboroto y gritando de entusiasmo, los niños levantaron el estrafalario muñeco justamente en su centro.
Hicieron rodar nieve hasta obtener una bola muy grande: eso era la barriga. Luego, otra más pequeña: era el pecho y los hombros. Por fin formaron otra aún más pequeña: la cabeza. Con unos tizos de carbón fingieron los botones del hombre de nieve, de tal modo que estuviera abrochado desde arriba hasta abajo, y le colocaron una zanahoria por nariz. En fin, un muñeco de nieve normal y corriente, como cualquiera de los que cada invierno hacen los niños a millares por todo el país, si es que las nevadas lo permiten. A los niños les hizo ilusión y estaban felices.
Varias personas que pasaron por allí ojearon al hombre de nieve y luego siguieron su camino, y la administración pública siguió administrando como si tal cosa.
El padre se alegró de que sus hijos retozaran al aire libre, de que se les pusieran encarnados los cachetes y de que luego volvieran con hambre a casa.
Pero a la noche, cuando todos estaban ya recogidos, alguien llamó a la puerta. Era el vendedor de prensa que tenía su quiosco en la plaza del mercado. Se excusó por venir tan tarde a dar la lata, pero dijo que consideraba un deber hablar cuatro palabras sinceras con el padre. Claro que los niños eran todavía muy chicos, admitió. Pero ya había que andar con cuidado con ellos, o de lo contrario no acabarían bien. Sólo por eso había venido, por otra cosa no lo hubiera hecho; lo único que le importaba era el bien de todos los niños, dijo; la educación infantil era una cosa que le preocupaba mucho. Y detalló que el motivo concreto de su visita era la nariz de zanahorias que estos niños le habían puesto al hombre de nieve; era una nariz colorada, y él, el vendedor, también tenía la nariz de ese color, y no porque bebiera más aguardiente de la cuenta, sino porque una vez se le heló. Una desgracia, no algo como para burlarse de él a la vista de todo el mundo. Aclaró por fin que había ido a pedir que no volviera a ocurrir, claro que, como ya había dicho antes, sólo en bien de su educación.
Tales observaciones impresionaron al padre bastante. Como es natural, los niños no deben meterse con nadie, por colorada que tenga la nariz y por mucho que eso les llame la atención. De modo que reunió a los chicos y, poniéndose serio, les dijo señalando al hombre del quiosco:
—¿De verdad que le habéis puesto esa nariz al muñeco para burlaros de este señor?
Los niños se asombraron sinceramente y, de momento, no entendieron de qué les estaban hablando. Cuando por fin cayeron en la cuenta, aseguraron muy formalmente que jamás les había pasado eso por la cabeza. Pero, por si las moscas, el padre los castigó y los dejó sin cenar.
El vendedor de prensa le dio las gracias y se fue. Al llegar a la puerta del piso, se cruzó con el presidente del Sindicato Comunal, quien saludó en seguida al dueño de la casa, satisfechísimo de recibir bajo su techo a tan importante personaje. Mas cuando el señor presidente vio a los niños, frunció el ceño y dijo malhumoradamente:
—Caramba, me alegra ver a estos pillastres. Tendrían ustedes que atarlos más cortos, ¡tan chicos y ya tan descarados! ¿Pues no miro hoy a la plaza por una ventana de nuestras oficinas y veo...? Pues estaban haciendo tranquilamente un hombre de nieve.
—Ah, sí, la nariz y el ven... —le interrumpió el padre.
—¡A mí qué me importa la nariz! Figúrese: primero hacen una bola, luego otra y luego una tercera. Ponen la segunda encima de la primera, y la tercera encima de la segunda. ¿No es para indignarse?
Como el padre no entendía qué quería decir, el señor presidente se enfadó todavía más.
—¡Pero si está clarísimo! Quieren dar a entender que en nuestro Sindicato Comunal se sienta un ladrón encima de otro. ¡Y eso es una calumnia! Hasta cuando se pretende publicar en los periódicos una cosa así, hay que presentar pruebas, y no digamos ya si se toca el asunto públicamente, nada menos que en la plaza del mercado.
Agregó, sin embargo, que, dadas la poca edad y la inexperiencia de los niños, estaba dispuesto esa vez a dejarlo pasar; no iba a exigir explicaciones. Pero, eso sí, la cosa no podía repetirse.
Cuando se preguntó a los niños si al poner una bola de nieve sobre otra habían querido dar a entender que en el Sindicato Comunal estaba sentado un ladrón sobre otro, sacudieron las cabezas y se echaron a llorar. Pero el padre, no hubiera un tío, páseme usté el río, los puso castigados de cara a la pared.
El día no terminó con eso. Se oyeron en la calle los cascabeles de un trineo que se paró, de pronto, ante la casa. Dos hombres llamaron a la puerta simultáneamente: un gordo desconocido embutido en un abrigo de piel de oveja y el presidente del Consejo Nacional.
—Ciudadano, vengo por causa de vuestros hijos —dijeron al mismo tiempo desde el umbral.
El padre, que ya estaba acostumbrándose a la cosa, acercó unas sillas para que los recién llegados se sentaran. El presidente miraba de reojo al otro, el gordo desconocido, y se preguntaba quién podría ser. Luego habló primero:
—Me asombra que permita usted que se haga en su casa propaganda enemiga. Mucho me temo que no tenga usted conciencia política. Mejor será que me lo confiese todo ahora mismo.
El padre no entendía por qué se le decía aquello.
—Se ve en sus hijos inmediatamente. ¿No sabe que se están burlando de los organismos de nuestro Estado de obreros y campesinos? Sus hijos, sus hijos, sí. Han levantado ese muñeco de nieve justamente frente a la ventana de mi cancillería.
—Ahora comprendo —suspiró el padre tímidamente—. Se trata de eso de querer representar el robo...
—¡Qué robo ni qué diablos! ¿Pero es que no entiende usted lo que significa levantar un hombre de nieve al pie de la ventana del presidente del Consejo Nacional? Sé muy bien lo que las malas lenguas van hablando de mí. ¿Por qué no van sus hijos y colocan un hombre de nieve al pie de la ventana de Adenauer? ¡Ah! No contesta, ¿eh? Un silencio que lo dice todo, señor mío. Yo sabré sacar de él mis consecuencias.
En el momento de oírse la palabra «consecuencias», se levantó el gordo desconocido, miró a un lado y a otro y se alejó de puntillas, sigilosamente, como dándose ya por satisfecho; volvieron a oírse los cascabeles del trineo, al pie de la casa, y el tintineo se fue perdiendo a lo lejos.
—Sí, amigo mío, le aconsejo que reflexione sobre lo que acabo de decirle —agregó el presidente—. ¡Ah, y otra cosa! Si por distracción salgo a veces de casa con los pantalones desabrochados, eso es cosa mía y sus niños no tienen ningún derecho a tomarme el pelo. Sepa que, si me da la gana, saldré de casa incluso sin pantalones y que a sus hijos no les importa un pimiento. Procure acordarse bien.
El acusado hizo comparecer a los niños, que estaban de cara a la pared, y les conminó a que confesasen inmediatamente que al hacer el muñeco de nieve habían pensado en el señor presidente y que además los botones eran un puyazo de mal gusto al hecho de que, a veces, el señor presidente llevaba por distracción desabrochados los pantalones.
Entre lágrimas y pucheros, los niños afirmaron que habían hecho su hombre de nieve nada más que para divertirse y sin la menor mala intención. Pero, por si sí o por si no, el padre no sólo los dejó sin cenar y los puso de cara a la pared, sino que les mandó hincarse de rodillas sobre el santo suelo.
Aquella noche aún volvieron a llamar a la puerta varias veces, pero el padre ya no abrió más.
Y, al día siguiente, pasé junto a un jardincillo donde los niños estaban jugando. Se les había prohibido ir por la plaza del mercado y los niños estaban discutiendo a qué iban a jugar esa mañana.
—Vamos a hacer un hombre de nieve —dijo el primero.
—¡Boh, un hombre de nieve corriente es muy aburrido! —contestó el segundo.
—Bueno, vamos a hacer un hombre que venda periódicos. Y le ponemos una nariz bien colorada. Porque la tiene así de colorada de tanto aguardiente, ¿no? El mismo lo dijo anoche —dijo el tercero.
—¡Qué tonto eres! Yo voy a hacer el Sindicato.
—Y yo al señor presidente, eso sí que es un hombre de nieve. Y además le voy a poner botones porque siempre lleva los pantalones sin abrochar.
Los niños se pelearon un poco, pero por fin se pusieron de acuerdo para realizar todos esos proyectos, uno detrás de otro. Y se pusieron a trabajar con mucho interés.
Siempre la leche, su cuota breve
Ayer 26 de julio de 2007 Raúl Castro dijo:
“Llevamos años diciendo que la leche se entrega a los niños hasta los 7 años. Lo que hay que hacer es producir leche para que se tome un vaso de leche todo el que quiera”Sabias, valientes y esperanzadoras palabras que hacen pensar que finalmente se va a resolver el problema de la leche en Cuba. Voluntad no falta. Esas palabras nos recuerdan otras no menos sabias, valientes y esperanzadoras que pronunciara su hermano:
“se va a instalar, ya satisfechas las necesidades, un combinado lácteo para producir leche en polvo, producir queso, enfriar la leche, que es uno de los problemas que tenemos ahora; y antes de que finalice el año estará establecido este combinado lácteo y habrá un gran excedente de producción de leche”
Eso lo dijo Fidel Castro el 19 de Febrero de 1965. En junio de 2003 en Argentina, la patria de la vaca, el futuro Convaleciente en Jefe revelaría una solución para que los niños cubanos mayores de 7 años no perdieran contacto con la leche: “En nuestro país nosotros les garantizamos un litro de leche a cada niño hasta los 7 años (aplausos). A partir de esa edad y debido a nuestros recursos le garantizamos una leche de otro tipo, ya que aproximadamente existen posibilidades, ahora esa leche la garantizamos a un costo de menos de un centavo de dólar. A ese niño con un dólar que le envía alguien que vive en el norte a un amigo, puede comprar la leche de 104 días”
O sea, que si la mafia de Miami comparara televisores de plasma unas cuantas pulgadas más pequeñas ese ahorro alcanzaría para que todos en Cuba pudieran tomar leche. ¿Será esa la solución en la que estará pensando el Máximo Sustituto? Y luego la gente se pregunta por qué en Cuba la gente no tiene acceso a google.
jueves, 26 de julio de 2007
Mas lagrimas negras
A este paso nos ahogamos con tantas lágrimas. Estas son las de Bebo Valdés y Diego El Cigala. Ando buscando videos de una reciente actuación del Cigala con Tata Guines pero no los encuentro. ¿Alguien sabe algo?
Vuelve Varela
El caricaturista Varela, conocido sobre todo por su trabajo en El Nuevo Herald (y por el performance que realizó en ese periódico con una metralleta de plástico, performance que fue calificado por los críticos como "demasiado realista") vuelve a la carga. Ahora lo hace con un blog de caricaturas. Su dirección es: http://varela1.blogspot.com/
Esta es una de sus primeras caricaturas en el blog.
Esta es una de sus primeras caricaturas en el blog.
El origen de Calle 54 [rectificacion]
Fernando Trueba cuenta donde quiera que lo quieran oír que Calle 54, su película sobre el jazz latino (una vez vi a Trueba en un Tower Records de Nueva York apertrechandose de grabaciones de jazz) surgió de esta descarga que filmó para el final de su comedia "Two Much", una comedia horrorosa por otra parte. No hay mal que por bien no venga diría la gente optimista. Aquí aparecen Michel Camilo, Paquito D'Rivera y Cachao entre otros.
Jay Leno hace un chiste sobre Cuba
Cortesía de Armando Tejuca:
Traducción: “De acuerdo a un nuevo estudio el 30% de los cubanos tiene sobrepeso, el otro 70% todavía está en Cuba”.
Traducción: “De acuerdo a un nuevo estudio el 30% de los cubanos tiene sobrepeso, el otro 70% todavía está en Cuba”.
miércoles, 25 de julio de 2007
Saludando el 26 de Julio
Este texto lo escribí hace 5 años pero como siempre es 26 espero que mantenga la vigencia.
Últimas horas de una granja
(Grabación realizada por el Servicio de Inteligencia Militar (SIM) el 25 de julio de 1953 en la Granjita Siboney.)
Juan Almeida: ¿Cuándo salimos para el carnaval?
Fidel Castro: No hay que apurarse. Para que las cosas salgan hay que prepararlo todo muy bien.
Juan Almeida: ¿Por qué hay que estar preparado para divertirse? La gozadera mientras más espontánea mejor.
Fidel Castro: ¿De qué gozadera tú hablas? Esto es algo muy serio.
Juan Almeida: ¿Tú no dijiste que esto era un viaje de estímulo para los que mejor habían salido en las prácticas de tiro? ¿Por qué tú crees que yo no fallé ni una vez?
Fidel Castro: Ah sí, el viaje de estímulo. Pero es que antes tenemos que resolver un asuntico. Queremos darle una sorpresita a una gente ahí.
Juan Almeida: Pero que sea rápido Fidel, que no me quiero perder una sola noche de carnaval. Fíjate que tengo hecha una cancioncita y todo. Dice: "dame un traguito ahora cantinerito/ dame un traguito ahora que nadie mira/ dame un traguito ahora que me da pena/ dame un traguito ahora que estoy contento/ dame un ..."
Fidel Castro: Está bien Juanito. Está buena la canción, pero ahora hay que hacer otras cosas.
Juan Almeida: El problema es que todavía no sé qué título ponerle.
Fidel Castro: ¿Y qué te parece "Dame un traguito"?
Juan Almeida: Oye Fidel, tú sí que eres un genio. ¿Cómo no se me había ocurrido antes? ¿Quieres que te ponga de coautor?
Fidel Castro: Mira Juan, tenemos cosas más importantes que perder tiempo con esa cancioncita de relajo. Mira a Cartaya como ha compuesto una canción con tremendo contenido. Cartaya, ¿cómo dice esa parte de la sangre?
Agustín Díaz Cartaya (canta): "La sangre que en Cuba se derramó/ nosotros no debemos de olvidar...".
Fidel Castro: ¿Ves? Eso sí es una canción...
Juan Almeida: Bueno, eso es verdad. Cuando el carnaval está bueno de verdad, la sangre corre como si fuera cerveza. Yo tengo un primo que bailaba con la comparsa de los Dandys que le sacaron un riñón de una puñalá y nadie de la familia lo olvidó.
Fidel Castro: ¿Todavía le llevan flores a la tumba?
Juan Almeida: No. Hasta que no tasajeemos al tipo no paramos.
Fidel Castro: Coño Juan, ¿ahora te vas a poner a hablar de puñaladas? Recuerda que nuestro objetivo...
(Se oyen ruidos de alguien que entra).
Renato Guitart: ¿Qué pasa caballero? Esto parece el teatro Alhambra en sus buenos tiempos. El negrito y el gallego discutiendo.
Almeida se ríe mientras Fidel Castro dice en tono cortante: Renato, ¿no te había dicho que hay cambio de planes? Tú vas a ir en el primer carro. Tú conoces la ciudad mejor que nadie.
Renato Guitart: Fidel, tú también conoces la ciudad. Además, yo...
Juan Almeida: Hombre, no se ponga así. Yo estaría encantado en ser el primero en entrar en la bachata.
Renato Guitart: ¿Bachata?
Fidel Castro: El quiso decir batalla. Almeida, ¿por qué no te vas a buscar tu fusil?
Juan Almeida: ¿Fusil? Con lo complicado que debe ser meterse en un carnaval con un fusil sin que te vea la policía y bailar y todo eso. Mejor sería llevar una navaja envuelta en un pañuelo y fuera catarro. Fidel, ¿a ti alguien te la tiene guardada de algún carnaval anterior?
Fidel Castro: Ve a buscar el fusil y no jodas más. Ah, y también pide que te den un uniforme.
Juan Almeida: Claro, cómo se me había ocurrido que íbamos a ir al carnaval sin uniforme... Jesús, ¿de qué vamos a ir disfrazados?
Jesús Montané: ¿De qué vamos a ir disfrazados? Por supuesto que de soldados.
Juan Almeida: ¡Esa sí que es buena! ¡La comparsa de los guardias! Mira, se me ocurre un nombrecito para la comparsa: Los Guardias de la Salación. Esa sí es buena. Y un estribillo que diga: "cuidado que ahí vienen los guardias/ los guardias de la salación/ muchacho no te pongas pesado/ o te bajamos un pescozón/ o te bajamos un pescozón/ eso sí somos nosotros/ los guardias de la salaciooooon". ¿Qué te parece?
Jesús Montané: No creo que a Fidel le guste mucho ese bonchecito. Tú sabes que él es muy serio para estas cosas.
Fidel Castro: ¿Qué pasa que no se oyen esos pollos, Pedrito?
Pedro Miret: ¿Qué pollos?
Fidel Castro: ¿Qué pollos van a ser? ¿No se supone que esta es una granja de pollos? Pues tiene que haber pollos. Pollos que se oigan por todas partes para no despertar sospechas.
Pedro Miret: Fidel, el problema es que como tuvimos que esconder las armas y los uniformes en las jaulas de los pollos no tuvimos donde traer los pollos de verdad.
Fidel Castro: Pues ahora me coges a 10 hombres y los pones a hacer como pollos para distraer la atención de los posibles delatores.
(Se escucha a varios hombres tratando de imitar a unos pollos. De repente se oye el sonido de un guanajo)
Fidel Castro: Oye, Pedrito, ¿y ese guanajo que estoy oyendo qué cosa es?
Pedro Miret: Es Machado Ventura, que quiere darle clases de idioma a los pollos.
Fidel Castro: Bueno compañeros. Los que no estén en labores de enmascaramiento los necesito aquí, que quiero decirles una cosa.
(Se escuchan rumores de gente reuniéndose en la habitación).
Fidel Castro: Bien compañeros, seré breve. Primero que todo quería hacerles una aclaración. Por razones de seguridad he tenido que decirles a muchos de ustedes que hemos venido hasta la ciudad de Santiago de Cuba para asistir al carnaval como estímulo por los buenos resultados que hemos tenido en los entrenamientos. Sin embargo, la razón por la que estamos aquí es algo distinta.
(Exclamaciones de desagrado).
Juan Almeida: ¿Más entrenamientos?
Fidel Castro: No Juanito. Compañeros, ha llegado la hora de la verdad. El momento de libertar a nuestra patria de la tiranía ha llegado. La patria ha depositado su última esperanza en nosotros y no debemos defraudarla. Esta madrugada, más exactamente a las cuatro de la mañana, tomaremos por sorpresa el Cuartel Moncada y con las armas allí obtenidas llamaremos al pueblo para dar la batalla final a la dictadura.
Juan Almeida: Eso está muy bien, ¿pero con qué armas atacaremos el cuartel?
Fidel Castro: ¿Cómo que con qué armas? Con las que tienen en sus manos.
Juan Almeida: Fidel, ¿y se puede saber a quién se le ocurrió la idea de asaltar el segundo cuartel más importante del país con fusiles 22 y escopetas de matar patos?
Fidel Castro: Yo soy un simple ejecutor del plan que les acabo de exponer. El verdadero autor intelectual de este plan es nuestro apóstol José Martí.
Juan Almeida: ¡Ave María Purísima!
TODOS: ¡Sin pecado concebida!
Juan Almeida: Fidel, no te conocía esa faceta. ¡Así que te has metido a espiritista! Mira que escondido te lo tenías...
Fidel Castro: Todos tenemos nuestro lado oculto. ¡Micaela, ya puede entrar!
Juan Almeida: Madrina... ¿qué usted hace aquí?
Micaela: A mí también me dijeron que iba al carnaval de Santiago y mírame aquí en una granja de pollos. Pero ya tú sabe mijo que uno está en esta tierra para ayudar.
Fidel Castro: Y hablando de pollos, ¿qué pasa con ese coro que no se oye?
CORO: Pío, pío, pío, pío...
Fidel Castro: Bueno Micaela, comuníquenos con el apóstol, que no hay tiempo que perder.
Micaela: A ver (empieza a emitir frases incomprensibles, gritos y aullidos hasta que por fin habla). Hay interferencia. Con Martí siempre tengo problemas con la interferencia. Mucho muerto oscuro por medio. Y él escondido atrás de ellos. A ver. ¡Sal de ahí Martí! ¡Sal de ahí Martí! Vamos, ayúdenme.
TODOS: ¡Sal de ahí Martí! ¡Sal de ahí Martí! ¡Sal de ahí Martí!
Juan Almeida: Oye, está bueno eso para una conguita... Formamos la comparsa Los Apóstoles de la Salación y acabamos con malanga. ¡Sal de ahí Martí! ¡Sal de ahí Martí!
Micaela: ¡Cállense que ya lo tengo! Necesito alguien que me dé la mano. El más macho que haya aquí.
Fidel Castro: ¡Raúl, tú mismo!
Raúl Castro: No, mejor Melba. Melba, ve y dale la mano a la señora.
Micaela: Ya lo veo. Está hablando...
Fidel Castro: ¿Y qué dice?
Micaela: Dice que "los niños nacen para ser felices".
Fidel Castro: Eso quiere decir que cuando ganemos debemos convertir el cuartel en una escuela. Pero del asalto, ¿qué dice?
Micaela: Ahora dice que "nuestro vino es agrio, pero es nuestro vino".
Fidel Castro: Quiere decir que todos los soldados van a estar borrachos y ése va a ser el mejor momento para atacarlos. ¿Y qué más? Pregúntale por dónde debemos atacar.
Micaela: Dice: "Está Alberto el militar/ que salió en la procesión/ con tricornio y con bastón/ echando un bote a la mar".
Fidel Castro: Bueno este... ya lo tengo. Si Alberto está montando en un bote es que es marinero, marinero es el tres en la charada. ¡Está diciendo que ataquemos por la posta tres!
Juan Almeida: Micaela, ¿puedes decirme cuál es el número que va a salir en la charada mañana.
Fidel Castro: Miren compañeros, vamos concentrarnos en lo que nos interesa.
Juan Almeida: Entonces, ¿vamos por fin al carnaval?
Fidel Castro: Me refiero a la libertad de la patria. Esas dudas que están planteando ustedes sobre las dificultades que tendremos en el asalto al cuartel pueden parecer muy razonables, pero este no es el momento ni el lugar para plantearlas. Con el enemigo casi al alcance de nuestras manos no podemos perder tiempo en discusiones inútiles. Yo propongo que los que tengan algo que plantear lo planteen mañana al mediodía, cuando el asalto haya terminado. Por otra parte, debemos considerar que en estos momentos un 10% de la guarnición está descansando en sus casas, un 50% está movilizado por los carnavales, un 5% debe estar en el hospital, otro 30%, debe estar durmiendo y un 4% debe haberse escapado para estar con una noviecita o cosas por el estilo. Nos queda un 1% que será fácilmente neutralizado por el 100% de nuestros hombres, que a su vez estará reforzado por el factor sorpresa, lo cual representa un 20% adicional y si a ello añadimos...
(Las siguientes 4 horas de grabación no están disponibles debido a un error técnico. Lo que se presenta a continuación son los últimos minutos que se han salvado).
Fidel Castro: ... lo que sumando a la baja moral combativa del enemigo representa otro 35% por ciento a nuestro favor, lo que significa unas posibilidades de éxito de 1500%.
Juan Almeida: Si eso es así, ya deben haberse rendido. Fidel, ¿por qué no nos vamos directo al carnaval a celebrar la victoria? Ya tengo el estribillo: "qué esperan pa' la rendición/ o les va a caer arriba una salación..."
Pedro Miret: Los que estamos rendidos somos nosotros. Son las cuatro de la mañana y no hemos podido dormir. Entre tú hablando y esos tipos haciendo pío, pío...
Jesús Montané: Fidel, ¿el asalto no era a las 4 de la mañana?
Fidel Castro: No, yo quise decir que a las 4 debíamos salir de aquí. Así que todos se me van preparando para salir. ¿Qué pasa Raúl, estás llorando? ¿Tienes miedo?
Raúl Castro: No, es que me da lástima con esos soldados que tenemos que matar. Son jóvenes y llenos de vida como nosotros, altos, fuertes, marciales, viriles. Fidel, ¿si ganamos me prometes ponerme al frente del ejército? Mira que yo tengo experiencia en eso. Recuerdo que cuando niño siempre estaba jugando a los soldaditos.
Fidel Castro: Sí Raúl, pero jugabas a los soldaditos con muñecas.
Raúl Castro: Es que a las muñecas, además de ser más grandes, se les pueden hacer ropitas y esas cosas.
Fidel Castro: ¿Y cuando te dio por los rusos, que empezaste a jugar con matriuskas? Pero lo importante ahora es aprovechar la sorpresa para entrar en el cuartel sin tener que disparar...
Raúl Castro: ¡Ay, haría cualquier cosa por evitar tanto derramamiento de sangre! ¿Qué tal si los estrangulamos con un alambre y así de paso ahorramos balas? Nunca se sabe cuando las cosas van a escasear.
Fidel Castro: No me hables ahora de escasez. Ya tendremos tiempo para eso. Bueno, ¿ya están listos? Pues nos vamos.
Pedro Miret: ¿Y qué hacemos con los que están piando?
Fidel Castro: Móntalos en una de las máquinas. Cuando los guardias nos pregunten les decimos que les llevamos los pollos para el almuerzo de mañana. ¿Todo listo? ¡En marcha!
Juan Almeida: Fidel, ¿no podemos pasar antes por el carnaval? Mira que seguro que queda alguna comparsita arrollando y ahí aprovechamos y le decimos al pueblo que se nos una y no tenemos que aparecernos solos en ese cuartel. Lo importante es estar en contacto con las masas...
Canción precoz
Raul Ciro ex- Superavit tuvo la gentileza de poner en youtube esta joyita. Es un video grabado en 1989. A esta "Canción precoz" le tengo un afecto especial porque algunas cosas que menciona Raúl las viví de primera mano. Por ejemplo, cuando él dice “barcos de papel en tu escalera” no es una metáfora: yo lo vi poniendo barcos de papel en la escalera que conducía al apartamento de una muchacha. Da igual por qué: me da mucho placer ponerles ese video.
La palabra y el bronce
Durante décadas el portal del restaurante Versailles ha sido el centro de discusión de cuanto tema humano o divino ha tenido a bien hablar el exilio de Miami. No existe un sitio en todo el planeta donde se haya hablado tanta mierda. Ya era hora de que le pusieran una tarja a tan relevante lugar porque esos cubanos han elevado la habladera de mierda a la categoría de arte y de fenómeno natural al mismo tiempo. Finalmente este mismo año, (el 20 de mayo nada menos) se desveló esa tarja que es en realidad un monumento al Hablamierda Desconocido Cubano figura en la que debemos sentirnos representados todos los compatriotas. El primer derecho que debería refrendar una futura constitución cubana es el de hablar mierda. Ese derecho protegería a un tiempo la libertad de expresión y nuestra lengua nacional. ¡Gloria eterna a los viejitos del Versailles que han sabido defender día tras día el rasgo más definitorio de nuestra identidad! Aquí está el ensayo de celebración por la muerte del Comandante frente al citado restaurant.
martes, 24 de julio de 2007
Relevista ante el microfono
Se anuncia para mañana 26 de Julio que el hermano del Convaleciente en Jefe dará un discurso. Esperamos que por el bien de nuestros compatriotas su discurso se concentre en la economía, en la economía de palabras quiero decir, y sea más breve que los de su hermano. A falta de otra cosa eso representará un verdadero alivio en contraste con su hermano el Comandante Cangrejo: mucha muela, poca carne y caminando para atrás. La carne seguirá siendo un rezago del pasado que no volverá pero al menos se agradecería el ahorro de muela. Digan lo que digan no va a ser una prueba de fuego. Apenas una prueba de audio.
Cachao y Bebo
Uno de los mejores momentos de la película Calle 54 de Fernando Trueba es precisamente el dúo que hacen Bebo y Cachao tocando "Lágrimas negras". Cuando parecía que ya no quedaba nada por decir de esa canción aparecen dos seres antediluvianos (de los que se fueron en cuanto llegó el Diluvio) a ofrecernos esta versión fresquísima de la que antes era la canción de los borrachos y ahora mismo es nuestro himno nacional alternativo.
El Guayabero con Marieta
Uno de los máximos representantes cubanos del doble sentido y la picardía criolla (que según Fontanarrosa “es sólo desesperación”) sin duda es el Guayabero. Aquí va con un clásico: "Marieta".
Un jab de dolares
"El pasado domingo 22 de julio, en horas del mediodía, se recibió la triste noticia de que dos de los más destacados atletas de boxeo, Guillermo Rigondeaux Ortiz y Erislandy Lara Santoya, no se presentaron al pesaje". Los funcionarios de la delegacion cubana a los Panamericanos todavia buscaban desesperados a los atletas que habian desaparecido, pensando que estarian secuestrados cuando el Comandante que es mas sabio saca sus conclusiones: "Sencillamente los noquearon con un golpe directo al mentón, facturado con billetes norteamericanos. No hizo falta conteo alguno de protección". Los golpes en dolares al parecer duelen mas que los de C.U.C. Gente que se escapan de la delegacion patria sin pensar cual es el indice de mortalidad infantil de la provincia que los vio nacer. El resto del post del Big Blogger aqui.
Anuncio
Hoy arribamos al visitante 10 000. El afortunado visitante 10 000 recibirrta un ejemplar de mi libro Leve Historia de Cuba siempre que pueda demostrar que el contador marcaba "10 000" cuando entro. Y lo del libro es en serio. Me comprometo a mandarselo.
A gozar con el carnaval
"Al carnaval/ de Oriente me voy/ donde mejor/ se puede gozar" cantaban los Matamoros en tiempos de la ignominiosa pseudo-infra-infecto-republica. Tejuca ha creado a su vez este clip usando fotos de los contemporaneos carnavales de Santiago y una conga que canta Boris Larramendi al final de su cancion "Bailen bien". Saludos al Boris que ahora mismo esta en La Habana (de visita). La ventaja que tienen los orientales es que los policias hablan en su mismo idioma.
El Jueves rectifica
Luego de la portada censurada del semanario humoristico El Jueves ahora la revista saca esta version. Eso es rectificar!
lunes, 23 de julio de 2007
The Sidewinder
Hace rato ando buscando en youtube "The Sidewinder", una de mis piezas favoritas de Lee Morgan. Lo único que he encontrado es esta versión del grupo de Lonnie Plaxico que por supuesto no anda cerca del Real McCoy.
Una taza de Chocolate
Chocolate Armenteros es una leyenda viviente de la música cubana (el artículo de wikipedia tiene un error de bulto: su nombre es Alfredo no Armando). Ha tocado con cuanta agrupación importante cubana y latina en las últimas seis décadas: tocó con Arsenio Rodríguez y su Conjunto, fue director musical de la Banda Gigante de Benny Moré y ha estado también con Machito, Paquito D'Rivera, Cachao, Charlie Palmieri y un larguisimo etcetera. Aquí en una de sus especialidades: la guajira.
Nos vemos en Universal
A los socios de Miami voy a estar firmando copias de Leve Historia de Cuba en la Libreria Universal (3090 SW 8TH Street) este sabado desde las 12 del dia hasta la 1:30. Nos vemos alla.
El Pible
El Pible, ex integrante deLa Leña del Humor de Santa Clara y de la Seña del Humor de Matanzas ha desarrollado una exitosa carrera como solista primero en Chile (mas exactamente en el desierto de Atacama) y luego en Miami (en la calle 8 por la noche, lugar donde hay menos gente que en el desierto de Atacama a la hora de la telenovela). Ahora acaba de pasar del canal 41 para MegaTV donde aparece en varios espacios. El talento de ese tipo es absolutamente inexplicable. Ahora esta haciendo presentaciones en vivo en el club Havana Night de Miami. Los dejo con una de sus mas recientes presentaciones ellas en el programa "Paparazzi".
Abajo el loqueo
Mi amigo Armando Tejuca hace un tiempo hizo una serie de clips usando fotos de Cuba. Abajo les pongo uno titulado precisamente "Abajo el Loqueo". Los versos que aparecen al final son, no se si hace falta decirlo, de Heberto Padilla.
domingo, 22 de julio de 2007
Sé feliz
Una de las grandes canciones de Descemer Bueno: “Sé feliz”. Nunca como la versión que hizo con Fernando Álvarez pero ya eso es demasiado pedir. El disco “Fernando Álvarez canta a Descemer Bueno” es uno de los mejores discos de boleros que se han hecho y se harán en mucho tiempo pero por desgracia nunca ha sido publicado comercialmente. Por ahí ruedan un montón de copias piratas. Si supiera cómo hacerlo lo colgaría completo en el blog.
Sigue la programación de verano
De vacaciones estoy con mi idea de programación de verano. Poca muela y mucha música. Aquí “Superfinos negros” de Free Hole Negro. La música está bien y también el estribillo. El resto de la letra es un buen ejemplo de cierto rap que se hace en Cuba que insiste en ser pedante y complicado por gusto (una cosa es que jodan con la idea de ser negros finos y otro que se la tomen a pecho) complementada con una edición creada especialmente para que uno no se entere de lo que está viendo.
Otra de Porno para Ricardo
Aquí en una presentación en la televisión cubana de Porno para Ricardo en 2002. La canción es “Trova con distorchon”. La próxima aparición de Porno en la televisión patria está programada para el 2040 como parte del ciclo “Musica del ayer”. Mientras esperan disfrútenlos cortesía de youtube. (Vi que en el sitio oficial de grupo han colgado un trozo de un texto mío en el que los mencionaba aunque no ponen quien es el autor: me encanta eso de ser el famoso "Anónimo" porque siempre me he querido atribuir "Las mil y una noches" y ciertos poemas que aparecen en los baños públicos)
Monólogo del pan
Vía Penúltimos Días que a su vez lo toma de Mauricio Pimienta este monólogo sobre el pan en Cuba, muy simpático, con esa complicidad que sólo se da en La Habana.
Conectado de Nuevo
Este es un programa humorístico peruano que tiene una larga serie sobre los encuentros entre el Comandante y Chávez a pie de cama. Están flojitos pero se les reconoce el esfuerzo.
sábado, 21 de julio de 2007
De vacaciones
Dentro de un rato salgo para Miami. Voy a estar dos semanas por allá. No postearé con la frecuencia acostumbrada pero me mantendré conectado. Trataré de aprovechar mi estancia en Miami para hacer un par de presentaciones del libro Leve Historia de Cuba. Desde aquí les avisaré dónde y cuando van a ser las presentaciones. Los dejo con otro fragmento del libro, una imitación de una crónica de Indias.
PEQUEÑA CRÓNICA DE INDIAS (E INDIOS)
“... y penetrado en una cabaña que en esas tierras llaman bohío vílos entregados a un juego que al parecer es costumbre en aquellas gentes. Hallábanse todos desnudos como sus madres los parió como que no dejan de estarlo nunca hombres y mujeres y a los primeros veíaseles que entre las piernas laxo les colgaba un cilindro como de la piel misma pero más oscuro y luego las mujeres se les contoneaban y de presto lo frotaban con la punta de la nalga o con otra parte del cuerpo hasta que el dicho artefacto se daba a endurecerse e inflamarse hasta alcanzar cosa de medio pie de luengo y así dispuestos con dicho artefacto en perfecta elevación se aproximaban a la mujer que tenían delante e introducíanlo en un orificio que éstas tienen al efecto y tornábanse a menear con grande gritería al parecer de victoria sin que yo pudiera tener entendimiento de quién fuese vencedor ni vencido porque nadie me explicara las reglas de este extraño juego. Cosa era de alegría verlos jugar cuando encendidos andaban y mucho más cuando las mujeres unas con otras jugaban que por carecer del referido artefacto hurgaban el orificio de su oponente con los dedos y aun con la lengua con lo que hubieran mucho placer y holganza. Y desta suerte todos iban quedando enlazados unos con otros que era de maravilla verlos que al cabo del rato no era posible distinguir unos cuerpos de otros. Y aunque no lo entendiese habría intervenido en aquel juego al que me convidaron de buenas maneras unos mancebos muy bien hechos de muy hermosos cuerpos y muy buenas caras si no fuera porque un fraile me indicase que aquello era cosa de idolatría e inteligencias con el maligno por lo que tornamos a salir a la intemperie donde aún se escuchaban las voces de contento que el tal juego produce.”
PEQUEÑA CRÓNICA DE INDIAS (E INDIOS)
“... y penetrado en una cabaña que en esas tierras llaman bohío vílos entregados a un juego que al parecer es costumbre en aquellas gentes. Hallábanse todos desnudos como sus madres los parió como que no dejan de estarlo nunca hombres y mujeres y a los primeros veíaseles que entre las piernas laxo les colgaba un cilindro como de la piel misma pero más oscuro y luego las mujeres se les contoneaban y de presto lo frotaban con la punta de la nalga o con otra parte del cuerpo hasta que el dicho artefacto se daba a endurecerse e inflamarse hasta alcanzar cosa de medio pie de luengo y así dispuestos con dicho artefacto en perfecta elevación se aproximaban a la mujer que tenían delante e introducíanlo en un orificio que éstas tienen al efecto y tornábanse a menear con grande gritería al parecer de victoria sin que yo pudiera tener entendimiento de quién fuese vencedor ni vencido porque nadie me explicara las reglas de este extraño juego. Cosa era de alegría verlos jugar cuando encendidos andaban y mucho más cuando las mujeres unas con otras jugaban que por carecer del referido artefacto hurgaban el orificio de su oponente con los dedos y aun con la lengua con lo que hubieran mucho placer y holganza. Y desta suerte todos iban quedando enlazados unos con otros que era de maravilla verlos que al cabo del rato no era posible distinguir unos cuerpos de otros. Y aunque no lo entendiese habría intervenido en aquel juego al que me convidaron de buenas maneras unos mancebos muy bien hechos de muy hermosos cuerpos y muy buenas caras si no fuera porque un fraile me indicase que aquello era cosa de idolatría e inteligencias con el maligno por lo que tornamos a salir a la intemperie donde aún se escuchaban las voces de contento que el tal juego produce.”
Take Five
Un clásico de Dave Brubeck: Take five. Hubiera preferido Blue rondó a la Turk pero no lo encontré tocado por él. Si quieren pueden ver una versión de Emerson Lake and Palmer.
viernes, 20 de julio de 2007
Chick Ferrari 14 (FINAL)
Capítulo XIV
Bajo el empuje de sus atacantes Chick ha caído en el suelo. Cada intento por defenderse de sus mordidas es inútil. O visto de otro modo, es muy útil para que sus atacantes se multipliquen instantáneamente. Cada golpe que lanza contra estos no consigue otra cosa que acrecentar su número. De hecho, ya el cuerpo de Chick ha desaparecido bajo una treintena larga de chiquillos que se le echan encima.
-¡Vamos Chick que tú puedes!- grita el Medio Lamo-azafata en un rapto de optimismo. Ha apostado todo lo que tiene (su cuerpo para ser exactos) a favor de Chick. Si pierde deberá masticarse a sí mismo para que el caníbal desdentado con el que hizo la apuesta se lo pueda tragar sin problemas.
Mientras tanto, Chick, mordido por todas partes, está a punto de darse por vencido.
Ya se ha dado por vencido. Para que no queden dudas se ha metido las manos en los bolsillos y así dar a entender que no piensa hacer nada más en su defensa. Es entonces que sus dedos tropiezan con los caramelos que la azafata le ha dado como casi póstumo regalo. Sin tener muy claro por qué, Chick toma un puñado de caramelos y los lanza al aire. Por unos segundos sus atacantes dejan de serlo para disputarse los caramelos, pero una vez devorados estos vuelven a lanzarse con los dientes en ristre sobre la carne de Chick. El detective en ese mismo instante atina a formular la siguiente conclusión: “El Mal es de apariencia insignificante, se reproduce al menor contacto... y le encantan los caramelos” tras lo cual piensa que si sobrevive a esta experiencia toda esa sabiduría acumulada podrá servirle de algo. Lanza otro puñado de caramelos pero se da cuenta de que el alivio es demasiado fugaz para buscar alguna esperanza en él. Entonces recuerda una frase que oyera alguna vez en los labios de su abuela y en cuyo significado nunca había logrado penetrar. La frase es esta: “haz bien y no mires a quien”. Chick, cerrando bien los ojos empieza a repartir caramelos a diestra y siniestra. En ese instante es que logra lo que de ningún otro modo hubiese conseguido.
El Mal, repartido ahora en medio centenar de chiquillos, luego de tragar los caramelos que les lanza Chick empieza a reducirse en el cuerpo de cada uno de sus representantes hasta desaparecer...
“El Mal es diabético” concluirá Chick más adelante.
Pero ahora Chick sigue todavía con los ojos cerrados esperando el próximo ataque del Mal. Entonces se siente zarandeado de un lado a otro hasta que reconoce la voz de Ford K. Brown en las siguientes palabras:
-¡Hemos ganado Chick! ¡El Mal ha sido derrotado!
-¿Y cómo anda tu apetito? ¿No te quedan ganas de comerme?
El rostro perplejo de Ford K. Brown le revela a Chick que el jefe de los Generosos Caníbales del Espacio ha perdido el gusto por la carne humana. Bueno, no del todo, porque en lugar de las mordidas que cabía esperar, Chick recibe un andanada de besos y abrazos por parte del jefe de los caníbales y sus seguidores.
-¡Somos y seremos eternamente buenos y nadie en esta galaxia podrá impedirlo!
-¡Viva nuestra eterna bondad!
A duras penas Chick logra escurrírsele a los ex -caníbales y reunirse con sus compañeros de viaje que, extrañamente, no están entregados a las muestras de amor al prójimo que ha contagiado a los caníbales.
-¿Ahora qué se supone que ocurra? ¿El bien durará eternamente? –pregunta Chick- ¿Tendremos que abrazarnos y besarnos todo el tiempo hasta el fin de nuestros días?
-Tampoco tienes que envanecerte demasiado, Chick -le dice el sordo ateo que parece bastante mejorado de su oído o está prestando más atención de la habitual al movimiento de los labios del detective.– El alcance de tu victoria sobre el Mal es limitado. Sólo durará un par de milenios y su área de influencia se limita a esta galaxia.
“¿Cómo hará para estar tan bien informado?” se pregunta Chick y ahora comienza a sospechar si el sordo ateo no tendrá comunicación telepática permanente con radio Celestial, la emisora que conduce San Pedro en persona. No obstante, prefiere no preguntarle. No quiere dejar mal parado el ateismo del interlocutor.
-Además –sigue diciendo el sordo- esa Bondad no te alcanza a ti que luchaste contra el Mal ni a nosotros que te apoyamos. Esas son las reglas del juego.
El sordo se sigue extendiendo sobre otras consecuencias de la victoria de Chick hasta que al final este le pregunta.
-¿Estás seguro que la derrota del mal tiene validez solamente para esta galaxia?
-¿Qué? ¿Te parece poco?
-No, no es eso –responde pensativo antes de preguntarle al capitán de la nave a qué distancia se encuentra la galaxia más cercana.
-Sólo un par de millones de años luz.
-Perfecto. ¿Habrá en el camino algún sitio donde repostar?
El capitán hace un gesto ambiguo que podría traducirse como “supongo que sí pero no estoy dispuesto a jurarlo así que no me culpen si no encontramos ninguno”. Chick entonces se dirige a todos sus compañeros de fatiga.
-Escuchen: luego que el Mal ha sido vencido quedamos nosotros como sus únicos portadores en toda la galaxia. ¿Acaso debemos exponer a la humanidad al terrible peligro de ser los únicos portadores del pecado original?
El murmullo que se levanta como respuesta podría resumirse en un “¿Por qué no?” o un “ “¡Que se jodan!”
Chick, siempre atento al sentir de la masa, decide cambiar de estrategia.
-Imagínense un mundo donde por bien que nos vaya no podamos despertar envidia en el próximo. Un mundo en que no podremos provocar rencor en nuestros enemigos porque no existen ni rencor ni enemigos. Un mundo en que no podamos pensar mal de los demás porque el Mal no es posible ni bien de nosotros porque el Bien es cotidiano e irrelevante...
Pocas veces Chick ha estado tan convincente. Diez minutos han sido suficientes para tener la nave lista para partir con todos sus tripulantes dentro.
Ya despega rumbo a lo desconocido la nave que alguna vez se limitara a recorrer la distancia existente entre la Tierra y la luna. Chick revisa con la vista cada rincón del sitio que en los últimos meses se le ha hecho tan familiar. Ahora, frente a él está parado el cuerpo del Medio Lamo que, fiel a su alma de azafata reparte bebidas y comida entre los pasajeros.
-Whisky J&B lunar por favor –dice Chick.
-Por supuesto cariño.
-No te preocupes –dice Chick tomando la peluda garra de la azafata – Todo saldrá bien. –añade aunque sin aclarar si se refiere a la recuperación de sus cuerpos originales, el embarazo del Medio Lamo o al viaje a la galaxia más cercana. Ahora Chick toma un sorbo de whisky. Sí, ya sabe de antemano que extrañará el sabor del licor extraído de las entrañas de la luna. Lanza ahora una última mirada a su galaxia natal. Entonces Chick descubre algo que no le ocurría desde que era niño, más exactamente un día en que unos chicos le quitaron su pelota de fútbol: tiene el rostro inundado de lágrimas que corren hasta formar un charquito en la barbilla.
-¿Qué pasa Chick? ¿Te ocurre algo? –le pregunta solícita la azafata.
-Nada, nada. Es que soy alérgico al whisky.
La nave parte mientas en el espacio las estrellas están más brillantes que nunca... o al menos así les parece a todos...
FIN
Solidaridad
Como ya se anunció aquí anteriormente en España un jueves mandó a incautar la última edición de la revista humorística El Jueves (La revista que sale los miércoles). A continuación les ponemos la nota que publicó la propia revista en su sitio web sobre el tema que es mucho más escandaloso que la supuesta infracción de la revista
¿ 20 de Julio de 2007?
Escribimos esta nota el viernes, 20 de Julio de 2007, a las 19h. Tenemos la redacción llena de medios de comunicación que nos preguntan el por qué del secuestro de la revista. No sabemos qué responderles. El Jueves ha publicado decenas, cientos de dibujos sobre la familia real ( y sobre políticos, famosos, la ETA y todo lo que se mueve). Incluso hemos publicado un libro, TOCANDO LOS BORBONES, un tomazo de 350 páginas que recopilaba los dibujos más divertidos.
Somos humoristas gráficos y trabajamos conscientes de que nuestra obligación, lo que nos piden los lectores, es que exploremos el límite de la libertad de expresión. Podemos aceptar que, incluso, en alguna ocasión, lo podamos traspasar . Gajes del oficio. Si nos pasamos para eso están los tribunales pero...¿un secuestro? ¿ la policía recorriendo los quioscos de todo el país retirando nuestra revista? ¿ De verdad escribimos esto el 20 de Julio del 2007?
Sin inercia
Un cuento viejísimo, tiene más de dieciséis años. Son obvios los puntos de contacto con "El guardagujas" de Arreola. Lo escribí en Cuba y lo leía en cuanta peña podía. Después de aparecer en algunas revistas salió publicado en mi libro “Lágrimas de cocodrilo” (Cádiz, 1998).
Sin inercia
En cierto lejano país los trenes siempre habían sido algo especial. Concientes de su importancia mantenían al país en continua zozobra. Con el mayor descaro incumplían los horarios que anunciaban los ingenuos itinerarios, poniendo a prueba el estoicismo de los pasajeros. Como solución de emergencia ante el caos, el gobierno se había visto obligado a añadirle 2 ó 3 meses a cada año para contrapesar el retraso acumulado. Pero el último capricho de los trenes ya fue desesperante. Les dio por rodar marcha atrás. Esta vez, sin embargo, el tiro les salió por la culata. Resultó ser que, a pesar de los esfuerzos de las locomotoras de viajar a la inversa, terminaban por avanzar hacia su destino correcto, ante el asombro de los propios vehículos. Se convocó, entonces, a los científicos del país a dar una respuesta al extraño fenómeno. No fue difícil dar con ella, aunque sí lo fue publicarla. Por fin, se dio a conocer que el país marchaba hacia atrás a mucha más velocidad que los trenes, con el resultante avance de éstos. Aplacada la inquietud que trae consigo todo misterio, llovieron las sugerencias basadas en el conocimiento de la nueva situación. Hubo hasta quién se atrevió a proponer que se hiciera marchar al país hacia adelante pero, afortunadamente, se ignoró tal aventurerismo, hasta que por su insistencia tuvo que ser pasado por las armas. Otra propuesta fue mejor acogida, gracias a su aplastante lógica. Ya que el país se empeñaba en marchar hacia atrás, se decidió detener los trenes, con lo que se logró que éstos llegaran a su destino cada vez más rápido, con el consiguiente ahorro de combustible. El atraso acumulado disminuyó hasta desaparecer. Pronto pudo contarse con un adelanto de casi 3 meses que se reservó para usarlo en tiempos mejores. Ahora, sin que se haya encontrado alguna explicación el país se ha detenido totalmente. Ya ni avanza, ni retrocede, y los trenes, después de tanta inmovilidad, se niegan a moverse. Aunque algunos estén complacidos con una situación tan estable, aparecen nuevas iniciativas. Para romper la inmovilidad muchos sugieren la celebración de maratones masivos, mientras otros, más conservadores, prefieren trotar en el lugar. Sin embargo, la propuesta que se ha adoptado oficialmente es la de empujar. El único inconveniente es que aún no está claro si será mejor empujar los trenes o el país.
Censura en España
Esto me lo mandó un socio vasco:
Durante el último debate del Estado de la Nación, el Presidente Zapatero anunció que se daría una subvención de 2500 euros a todos los españoles (o residentes) que tuvieran un hijo. Sobre la base de este anunció, la Revista Humorística El Jueves sacó la portada en la que se ve al príncipe Felipe y a la princesa Letizia fornicando (para usar un término científico) y el príncipe, muy contento, se da cuenta que si su mujer se queda embarazada, ganará 2500 euros y que entonces será lo más parecido a trabajar que habrá hecho en su vida.
Bueno, pues resulta que este dibujo es un delito en España, porque supuestamente es constitutiva de los delitos de injurias al sucesor de la Corona y de menoscabo del prestigio de esta institución previstos en los artículos 490.3 y 491 del Código Penal.
No estoy muy seguro si lo injuriante es el dibujo de Sus Majestades teniendo sexo, el príncipe reconociendo que no ha trabajado en su vida o las dos cosas.
En todo caso, el Juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo, ha ordenado la requisa de todos los números en venta, ha ordenado se embargo d el molde original del dibujo, ha prohibido la venta del semanario y quiere ampliar la orden para que el dibujo también se retire de la pagina web de la revista: www.eljueves.es [esto al parecer ya se cumplió, ahora mismo no se puede acceder a la pagina].
Se los mando, para que lo disfruten (salvo que sean monarquicos)
un abrazo
aitor
Más Fontanarrosa
Recordando a Fontanarrosa que se acaba de ir les pongo algunas frases de su personaje de caricaturas el gaucho Inodoro Pereyra con su mujer Eulogia y su perro Mendieta.
FRASES INOLVIDABLES DEL GRAN INODORO PEREYRA
"Endijpué de tantos años, si tengo que elegir otra vez, la elijo a la Eulogia con los ojos cerrados. Porque si los abro elijo a otra".
- Dígame don Inodoro ¿usté está con la Eulogia por alguna promesa?
- Mendieta, uno se deslumbra con la mujer linda, se asombra con la inteligente... y se queda con la que le da pelota.
- Vago no soy, quizá algo tímido para el esjuerzo.
- Estoy comprometido con mi tierra, casado con sus problemas y divorciado de sus riquezas.
- ¿Y usted cómo se gana la vida?
- ¿Ganar? ¡De casualidá estoy sacando un empate!
- ¿No andará mal de la vista, don Inodoro?
- Puede ser. Hace como tres meses que no veo un peso.
- ¿Por qué esta agresión gratuita?
- ¡Si quiere se la cobro!
- El pingüino es monógamo.
- ¿Y por qué cree que le dicen Pájaro Bobo?
- Con la verdá no ofendo ni temo. Con la mentira zafo y sobrevivo, Mendieta.
- La historia lo juzgará. Pero tiene el mejor de los abogados: el olvido.
- Eso de "hasta que la muerte los separe" es una incitación al asesinato.
- Acepto que la Eulogia es fulera, pero es de las que demuestran la beyeza por el absurdo.
- Usté no está gorda, Eulogia. Es un bastión contra la anorexia apátrida.
- ¿Puede una persona disaparecer de a pedazos? Porque a la Eulogia le desapareció la cintura.
- Pereyra, míreme a la cara.
-¿Por qué este castigo, Eulogia? ¿Por qué tanta crueldá?
- La Eulogia es, lejos, la mejor prienda que conocí en mi vida. Bien lejos... 20, 30 kilómetros. De cerca es así, jodida...
- La Eulogia es una santa. No como mi cuñada que sufre el Síndrome de la Abeja Reina. Se cree una reina y es un bicho.
- A veces la picardía crioya es sólo desesperación, Mendieta.
- Ahura hay fertilización asistida. Vea el caso de la señora del viejo Aredes. Quedó embarazada. En el pueblo se comenta que al viejo lo ayudaron.
- ¡Mire esta vaca, Serafín! Musa inspiradora de miles de composiciones escolares... ¡Y ahora es acusada de traficante de colesterol por el naturismo apátrida! Nos da su leche, su carne, su cuero. ¡Lo quiero ver a usté haciéndose una campera de zapayitos!
- La muerte nivela a güenos y malos, don Inodoro. Lo malo es que nivela pa' bajo.
- No tenemos que copiar las cosas malas de ajuera, Lloriqueo. ¡Nosotros tenemos que crear nuestras propias cosas malas!
- Estuvo divertido el pesebre viviente este año, Mendieta.
- Bien la vaca. Algo sobreactuado el burro.
- Soy crítico meteorológico, señor. La tormenta de anoche. "Floja iluminación de los relámpagos, yuvia repetida, escenografía pobre y pésimo sonido de los truenos en otro fiasco de esta puesta en escena de Tata Dios. Una típica propuesta de verano, liviana, pasatista, para un público poco exigente".
- ¡No me diga que va a barrer, Pereyra! ¡La última tarea doméstica que hizo jué doblar una serviyeta!
- Yo no quiero ser irrespetuoso, Eulogia, pero lo que ha hecho Tata Dios con usté es abuso de autoridá.
Protejamos los derechos humanos
Esto lo saqué de Penúltimos días. Una entrevista a Rasguño, un capo de la droga colombiano que estuvo preso en Cuba. El tipo cuenta cómo le pasó un dinero a Maradona para que intercediera por él pero el futbolista se quedó con el dinero y de cómo lo torturaban poniéndole música de Silvio a todo volumen. Parece un cuento mío: el pobre hombre –es un decir, se compraba caballos de un millón dólares- encerrado mientras le ponen a todo meter aquello de “Yo me muero como viviiiií”. Amnistía Internacional tiene que tomar cartas en el asunto de llevar la música de Silvio a las prisiones. En la Convención de Ginebra sobre la tortura deberá incluirse una cláusula sobre exponer a los prisioneros a las canciones de Silvio. Y a sus declaraciones. O a las obras de teatro de Abel Prieto. Cuando la humanidad se felicitaba por haber sobrevivido a su novela El vuelo del gato (hace tiempo escribí un texto sobre ella)ahora la adaptan a teatro. La van a llevar al teatro Sauto de Matanzas. Matanceros: no se resistan. La única opción es huir (del teatro). Luego la convertirán en un serial de televisión y para rematar (nunca mejor dicho) aparecerá su versión radial para ser transmitida en Radio Reloj. Pero primero seguro van a probar en las prisiones a ver cuánto resisten los canas, como hacía Mengele. Y no es que uno sobreproteja a los presos pero los espectadores normales al menos tienen la opción de irse del teatro. A El vuelo del gato habrá que incluirlo en la Convención de Ginebra, pero no la de la tortura sino la de la guerra, junto con las bombas racimo y las minas antipersonales. Uno nunca entiende por qué tanta crueldad.
jueves, 19 de julio de 2007
Esta es mala
Se murió Roberto Fontanarrosa, uno de los grandes del humor. Era argentino, el resto eran virtudes. Creador de personajes como Inodoro Pereyra y Boogie el aceitoso, escribió un montón de cuentos y novelas divertidísimos y era colaborador habitual del grupo Les Luthiers. “Chick Ferrari”, la noveleta que he venido sacando en el blog era un homenaje o –como se decía antes- un plagio de su Boogie el aceitoso. Sé que ahora mismo muchos cubanos estamos lamentando su muerte, sobre todo la gente que se dedica al humor. Si quieren ver cosas de él pueden entrar aquí. Los dejo un video de la entrega del premio La Catrina en la última Feria del Libro de Guadalajara.
Duanel Díaz sobre Heberto Padilla
Padilla, la poesía, la historia
“¿Puede la poesía aproximarse a la política sin comprometer definitivamente su calidad o su autonomía?”: vale la pena pensar en esto. Pablo de Cuba, que tiene todo el derecho a cuestionar la calidad poética de Padilla sin ser acusado por ello de castrista, supone que no, cuando afirma que su promiscuidad con la política fue en detrimento de la poesía del autor de Fuera de juego, y que esta posee escaso valor más allá de aquella coyuntura de la que el nombre del poeta es inseparable. Yo, por mi parte, respondo afirmativamente a la pregunta de marras. Sobran los ejemplos: Brecht, Auden, Pound, por poner los tres que ahora se me ocurren. Desde luego que Padilla no es poeta tan grande como estos, pero es bueno no perder la perspectiva. Apreciado en su contexto, parece evidente que Padilla es uno de los grandes poetas cubanos de la etapa posterior a 1959. Ahí está el antológico “Infancia de William Blake”, incluido en El justo tiempo humano, y si es cierto, como recuerda Hernández Busto, que hay en ese libro poemas apologéticos, no lo es menos que la gran mayoría de los mejores poetas cubanos de las últimas décadas los han tenido tanto o más que Padilla. Mientras los otros buenos poetas de su generación -Retamar y Fayad Jamís- continuaron maquillando con sus versos a la dictadura castrista, él escribió Fuera del juego.
“El último vate murió en 1914”, dijo allí, manifestando una aguda conciencia de la tensión entre poesía e historia en que se debate la modernidad. Si su antagonista Lezama quiso resolver esa tensión afirmando la capacidad integradora, redentora y profética de la poesía, Padilla, como Piñera, se mostraba conciente de aquella pérdida del aura que, en un célebre poema de Baudelaire, constituye simbólicamente a la desdichada conciencia moderna. Para este poeta que no es ya un vate asumir una historia donde la utopía se convierte en pesadilla -esa historia que es en buena medida la historia del siglo- será colocarse enfáticamente “fuera del juego”. Testimoniar la fascinación de los escritores del Este europeo por las capitas de nylon y los artículos de consumo procedentes del otro lado de la “cortina de hierro”; el sacrificio que en su nombre, el de la Historia con mayúsculas, se les exige a todos los ciudadanos; la opresiva situación donde los poemas se vuelven peligrosos.
En aquellos versos Padilla, a su pesar, fue profético. “Levántate, miedoso, -había escrito – / y vuelve a tu agujero como ayer, despreciado, / inclinando otra vez la cabeza, / que la Historia es el golpe que debes aprender a resistir. / La Historia es este sitio que nos afirma y nos desgarra. / La Historia es esta rata que cada noche sube la escalera. / La Historia es el canalla / que se acuesta de un salto también con la Gran Puta”, y él fue el miedoso en Villa Marista; él debió inclinar la cabeza ante los comisarios en la UNEAC; en su persona la poesía y la inteligencia fueron humilladas por el tirano.
Su célebre discurso de autocrítica marca con el no menos célebre de Castro en la Biblioteca Nacional los límites de toda una época: entre esos dos discursos, alfa y omega, síntoma y cumplimiento, advertencia y castigo, transcurrió, con la espada de Damocles en la cabeza, toda la literatura cubana de los sesenta. Dicho de otro modo: entre las “Palabras a los intelectuales” y el mea culpa de Padilla -que fue el mea culpa de los intelectuales, pues el poeta fue obligado a representar (auto)críticamente a todo el gremio- se jugó una partida entre las armas y las letras que estaba ganada por las primeras desde el principio. Con su famoso dictum el discurso de Castro estableció un margen cuyo paulatino estrechamiento condujo al discurso de Padilla: si en 1961 el Comandante decía que la situación cubana nada tenía que ver con Stalin, por lo que era preciso olvidar el fantasma del estalinismo, diez años después en la grotesca autocrítica de Padilla ese fantasma se presentaba con la fuerza de las evidencias. De aquellas reuniones clausuradas por Castro surgió la UNEAC, y fue justo allí, en la vieja casona del ahorcado, que el mea culpa del poeta evidenció la naturaleza policíaca de la institución presidida por Guillén.
Si se acepta, con Retamar, que la Revolución cubana abrió la literatura a la oratoria y el testimonio, habrá que aceptar que el discurso de Padilla constituye una de las piezas fundamentales de nuestra literatura revolucionaria. A fuer de caricaturesca, esa autocrítica donde el poeta reconoce su abyección y agradece a la Seguridad del Estado es toda una denuncia, la única denuncia posible; lo que en un primer nivel de sentido es una apología, en un segundo que no escapaba a nadie con un mínimo de lucidez, constituye justamente lo contrario. Con su discurso hilarante y conmovedor Padilla ponía a uno de los polos de la escritura panfletaria a significar el otro, burlando así magistralmente al poder totalitario, en una revancha de las letras que evidenciaba cuánto de pírrica tenía la victoria del estado totalitario. Al jugar el difícil papel del Galileo brechtiano, el poeta brindó la ocasión para que un buen grupo de intelectuales de izquierda, ya descontentos del rumbo de los acontecimientos en Cuba, rompieran públicamente con el régimen de Castro. Aun cuando su poesía fuera mala –que no lo es-, a Padilla hay que agradecerle eso –que no es poco.
Y hay que volver a la pregunta inicial, para responderla desde la coyuntura actual, tan diferente a aquella de 1971. Pues la separación de la política y la literatura, revolucionaria en relación con la total subordinación que establecía la escolástica marxista predominante durante los años setenta, puede volverse más bien conservadora en el contexto de una política cultural que ha tenido que adaptarse al brusco cambio de circunstancias de los años noventa. Ya se puede ser intimista, vanguardista, decadente, expresionista o absurdo, justo en la medida en que, desaparecido el antiguo contexto comunista, con ello el estado pretende adquirir una cierta respetabilidad democrática mientras mantiene la prohibición original: “Contra la Revolución, nada”. Hoy que el hermético Lezama ha sido cooptado por las instituciones, Padilla, poeta brechtiano, sigue representando una poesía civil que ha de oponer la necesidad material a las sempiternas coartadas ideales o espirituales.
Duanel Díaz
Padilla, un caso
A partir de un artículo de Pablo de Cuba Soria en El Nuevo Herald y las consiguientes respuestas de Belkis Cuza Malé, Jorge Luis Arcos y Nicasio Silverio comienza a generarse un debate en torno al poeta Heberto Padilla. La respuesta fuera de tono de Belkis Cuza Malé parece darle la razón al iniciador del debate. Al querer la ex esposa de Padilla convertir en agente castrista a todo el que cuestione la calidad poética de su ex marido afirma sin querer la necesidad de esos cuestionamientos pero al mismo tiempo enturbia el sentido del debate. A Belkis Cuza Malé se le escapa la principal debilidad del artículo de Pablo de Cuba: fuera de algunas frases rotundas (pero no por ello especialmente sustanciosas) nos convence de poco más que de su derecho a cuestionar la calidad poética de Padilla. Nos dice un par de veces que el título de “El hombre junto al mar” es ridículo (lo cual es cierto) pero otro tanto se puede decir del nombre del autor del artículo cuya unica justificación aceptable es que nació con él y no se trata de un seudónimo que le sentaría mejor a un repentista de Palmas y Cañas o a un pianista de un restaurante de Miami. (Justificación ya que no disculpa porque podria usar cualquier otro nombre, aunque sea “Neftalí Reyes”). Su artículo se resiente por esa obsesión canónica que tanto aqueja a nuestros escritores en estos tiempos y en el empeño de resolverlo todo con el dictamen de que se trata de un poeta menor. Es esa una solución fácil pero engañosa si se piensa en la dificultad de encontrar en Cuba a algún poeta post Lezama que escape del todo a la vaga maldición de poeta menor. Dando por sentado la pertinencia de cuestionar la calidad poética de Padilla -o su necesaria impertinencia- queda ese otro problema que resume Pablo de Cuba cuando se pregunta retóricamente: “¿se sostiene la obra de Heberto Padilla más allá del entramado político en el que se halla sumergida hasta hoy?” Intuyo que esa pregunta de algún modo quiere incluir una cuestión más vasta: ¿puede la poesía aproximarse a la política sin comprometer definitivamente su calidad o su autonomía? Que el entramado al que se refiere Pablo de Cuba Soria se haya sostenido tanto tiempo –al punto que de circunstancia se haya convertido en naturaleza- explica la persistencia del fervor con que todavía muchos lectores –incluso los que habitualmente eluden la poesía- se acercan a los poemas de Padilla, un fervor muy parecido a aquél con el que, según Borges, los libros se convierten en clásicos. Puesto a escoger yo preferiría que las causas de ese fervor, que según Pablo etc… descansan en ese entramado desaparezcan junto con el entramado de marras pero si de lo que se trata es de crear un conjuro que pretenda anular al poeta y con ello las causas de su fama (esto es, el dichoso entramado) me parece un procedimiento un poco chungo. Más tarde vuelvo sobre el tema-caso Padilla.
La Habana
Esto prácticamente aparece en cualquier sitio cubano que se respete pero no hace daño ponerlo una vez más. Yo mismo lo había puesto antes pero esta es la versión más completa que he encontrado. A mí siempre me resultará muy grato saber que en La Habana sigue habiendo gente que hace cosas así. Por cierto ¿alguien sabe quién es ese muchacho?
miércoles, 18 de julio de 2007
Chick Ferrari 13
Capítulo XIII
-¿Y si venzo qué obtendré? –pregunta Chick.
-No se puede estar todo el tiempo pensando en uno mismo –le aconseja Ford K. Brown mientras con un cuchillo corta una lasca del grueso brazo que pertenece al actual cuerpo de Chick.
-¿En qué quieres que piense? ¿En ti y en tus caníbales? –pregunta Chick envalentonado por su absoluta falta de perspectivas.
-No, pero sí podrías pensar en lo bien que funcionaría el universo si el Mal pudiese ser derrotado, aunque no te oculto que las probabilidades son inexistentes –dice Ford K. Brown dejando escapar una risilla irónica – Yo no pienso prometerte nada. No nos faltan deseos de meterte el diente pero si vences al Mal pudiera ser que se nos quitara el apetito. –concluye al tiempo que se echa a la boca un trozo de carne que le acaba de cortar a Chick.
-¿Y si a pesar de vencer al Mal todavía conservas deseos de comerme? –dice Chick con un tono de indiferencia bastante bien logrado- No es que me preocupe. Sólo pregunto por curiosidad.
-Será entonces porque no podemos hacer por ti nada mejor que pasearte por nuestro sistema digestivo.
Ford va a llevarse a la boca un trozo de carne de Chick que acaba de cortar cuando irrumpe en la habitación una mujer ya entrada en años que le arranca la carne de la mano y tirándole de la oreja se lo lleva a rastras mientras no para de gritarle:
-¡Cuantas veces te lo he dicho, cuantas veces!
Chick está agradeciendo mentalmente la providencial aparición de la señora cuando el jefe de relaciones públicas de los Generosos Caníbales del Espacio le comenta:
-Es la madre del jefe máximo. Muy buena persona ella, pero eso sí: no soporta que los hijos estén picando la comida antes de que la sirvan.
Mientras lo conducen hasta el calabozo donde lo esperan el resto de sus compañeros de viaje se tantea sus adiposas y maltratadas carnes y piensa en el mejor modo de entrenarse para una pelea contra el Mal. El combate será a la mañana siguiente pero aún así cree que podrá hacer algo. Hacer cuclillas, levantar pesas, perseguir gallinas. Como en las celdas seguramente será difícil conseguir gallinas tendrá que conformarse con atrapar ratones con la mano. No obstante todos sus planes se ven interrumpidos por los saludos y las palabras de consuelo de quienes han corrido tantas aventuras junto a él.
-Ánimo Chick –le dice Krim, uno de los hermanos siameses- después de todo...
-...hay cosas peores que la muerte –completa la frase No-Do, el otro componente del dúo.
-No te preocupes amigo –le dice el sordo- No estarás solo en el otro mundo por mucho tiempo. Prometieron comernos en cuando terminen contigo. Además, cuando llegues puedes preguntar por mis padres que se murieron el año pasado.
Una pequeña multitud se agolpa en torno a Chick para pedirle que trasmita todo tipo de recados a sus familiares en el más allá. Chick los escucha con fastidio preguntándose por qué está tan arraigada la idea de la invencibilidad del Mal. Ahora los que lo rodean abren paso al capitán de la nave, al Medio Lamo, embutido en el cuerpo de la azafata y a esta última que conserva la monstruosa figura del Medio Lamo.
-Chick, sólo te pido que en un momento como este olvides todas las diferencias que pudimos haber tenido en el pasado. –Chick no responde pero piensa que lo que no puede olvidar son las diferencias corporales que tienen en el presente.
-Sabes algo hermano –le dice ahora el Medio Lamo, atenuado por su apariencia femenina- siempre estaré orgulloso de ti. Aún con ese estúpido cuerpo de vieja gorda.
La azafata en cambio, envuelta en el repelente cuerpo del Medio Lamo se le acerca y le dice al oído.
-Sé que este no es el momento apropiado pero quiero que sepas que vamos a tener un niño. Sólo que ahora crece en el cuerpo que ocupa el alma de tu hermano.
A Chick solamente le faltaría que su antiguo cuerpo se le acercase y le dijese: “sigue adelante Chick, esta es la película más fascinante en la que he participado”. Eso es justamente lo que le ocurre como para recordarle una vez más que su cuerpo ahora está ocupado por el alma tonta de Marilyn Monroe. “Ya me gustaría a mí encontrarme con su cuerpo original. ¿Dónde lo habrá dejado?” piensa mientras busca el modo de escabullirse hacia la cama donde pasará la última noche de su vida. Cuando al fin lo logra encuentra junto a su cama al monstruo con alma de azafata.
-Me di cuenta de que tendríamos un niño cuando vi a tu hermano desmayarse al llegar aquí.
Chick mira a su alrededor y encuentra razones suficientes para despertar las náuseas de cualquiera, aun sin estar embarazado.
-Adivino lo que estás pensando pero una mujer enseguida se da cuenta de esas cosas –dice mientras lo acaricia con su garra derecha.- Aunque si quieres podemos intentarlo de nuevo...
Chick recorre una y otra vez con la vista el cuerpo intruso y peludo de la azafata y el suyo propio hasta que al fin dice:
-Por favor, esta noche preferiría estar solo.
-Está bien, -responde su deformada amante- pero antes déjame darte algo para que te lleves al otro mundo. Quizás allá pueda serte útil. –y le entrega al detective un paquete de caramelos-. Nunca llegué a repartirlos entre los pasajeros pensando que algún día podrían ser necesarios y ese día ha llegado. Espero que te ayuden a recordarme.
Chick piensa primero si habrá dentistas en el más allá y luego que cuál será su tarifa. Hace de tripas corazón y le da un beso de despedida a la azafata. Ahora está solo en su lecho pero no logra conciliar el sueño. Frente a él como en una película desfilan todas la imágenes de su propia vida. Su primera comunión, su primer juego de fútbol, el encuentro con su padre en Santa Rita del Valle.
Chick comienza a preocuparse.
Ha oído decir que ese tipo de imágenes acuden a la mente cuando la muerte está más cerca que la ropa interior. Reconoce entonces el momento en que cuando era niño estuvo fisgoneando a una prima mientras se duchaba. Luego ve a otra mujer desnuda y justo cuando empieza a entusiasmarse con la visión esta se oscurece. Chick primero se molesta y luego piensa que esa interrupción puede ser un buen presagio. Es entonces que escucha unos silbidos y recuerda que la imagen pertenece a la primera película porno que fue a ver al cine y que la torpeza del proyeccionista le impidió ver la película hasta el final, un trauma del que todavía no ha podido recuperarse. Llega el amanecer y el detective se da cuenta que durante toda la noche no ha hecho otra cosa que contemplar imágenes de su propia vida.
-Cortando unas cuantas escenas y con un happy end no estaría nada mal como película. –se dice a sí mismo segundos antes de que lo llamen a comparecer a la pelea.
El estadio donde se va a celebrar el combate es circular como otros en los que ha estado. La diferencia es que esta vez es a él a quien le toca estar en el centro. De un momento a otro saldrá por la puerta frente a la que se encuentra parado el Mal. Nunca ha imaginado sus formas pero ahora hace un intento. Escamas, tentáculos, ventosas, fluidos pegajosos y malolientes. Cuando termina de hacerse una idea de conjunto se da cuenta que no habría podido imaginar algo más parecido a su hermano el Medio Lamo.
Sin embargo, lo que sale corriendo ahora hacia él es un chiquillo de unos doce años. Antes de que las primeras neuronas de Chick tengan tiempo a desperezarse, el chiquillo le está mordiendo la pierna. Chick intenta apartarlo de una patada y lo logra con más facilidad de la prevista, sólo que por efecto del golpe ahora, en lugar de uno, del suelo se levantan dos muchachos idénticos que se levantan a morderlo.
“Si el primero es el Mal, el segundo es el Peor” es lo último que piensa Chick antes de que los dientes del Mal vuelvan a hincarse en su pierna.
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