Dentro de un rato salgo para Miami. Voy a estar dos semanas por allá. No postearé con la frecuencia acostumbrada pero me mantendré conectado. Trataré de aprovechar mi estancia en Miami para hacer un par de presentaciones del libro Leve Historia de Cuba. Desde aquí les avisaré dónde y cuando van a ser las presentaciones. Los dejo con otro fragmento del libro, una imitación de una crónica de Indias.
PEQUEÑA CRÓNICA DE INDIAS (E INDIOS)
“... y penetrado en una cabaña que en esas tierras llaman bohío vílos entregados a un juego que al parecer es costumbre en aquellas gentes. Hallábanse todos desnudos como sus madres los parió como que no dejan de estarlo nunca hombres y mujeres y a los primeros veíaseles que entre las piernas laxo les colgaba un cilindro como de la piel misma pero más oscuro y luego las mujeres se les contoneaban y de presto lo frotaban con la punta de la nalga o con otra parte del cuerpo hasta que el dicho artefacto se daba a endurecerse e inflamarse hasta alcanzar cosa de medio pie de luengo y así dispuestos con dicho artefacto en perfecta elevación se aproximaban a la mujer que tenían delante e introducíanlo en un orificio que éstas tienen al efecto y tornábanse a menear con grande gritería al parecer de victoria sin que yo pudiera tener entendimiento de quién fuese vencedor ni vencido porque nadie me explicara las reglas de este extraño juego. Cosa era de alegría verlos jugar cuando encendidos andaban y mucho más cuando las mujeres unas con otras jugaban que por carecer del referido artefacto hurgaban el orificio de su oponente con los dedos y aun con la lengua con lo que hubieran mucho placer y holganza. Y desta suerte todos iban quedando enlazados unos con otros que era de maravilla verlos que al cabo del rato no era posible distinguir unos cuerpos de otros. Y aunque no lo entendiese habría intervenido en aquel juego al que me convidaron de buenas maneras unos mancebos muy bien hechos de muy hermosos cuerpos y muy buenas caras si no fuera porque un fraile me indicase que aquello era cosa de idolatría e inteligencias con el maligno por lo que tornamos a salir a la intemperie donde aún se escuchaban las voces de contento que el tal juego produce.”
PEQUEÑA CRÓNICA DE INDIAS (E INDIOS)
“... y penetrado en una cabaña que en esas tierras llaman bohío vílos entregados a un juego que al parecer es costumbre en aquellas gentes. Hallábanse todos desnudos como sus madres los parió como que no dejan de estarlo nunca hombres y mujeres y a los primeros veíaseles que entre las piernas laxo les colgaba un cilindro como de la piel misma pero más oscuro y luego las mujeres se les contoneaban y de presto lo frotaban con la punta de la nalga o con otra parte del cuerpo hasta que el dicho artefacto se daba a endurecerse e inflamarse hasta alcanzar cosa de medio pie de luengo y así dispuestos con dicho artefacto en perfecta elevación se aproximaban a la mujer que tenían delante e introducíanlo en un orificio que éstas tienen al efecto y tornábanse a menear con grande gritería al parecer de victoria sin que yo pudiera tener entendimiento de quién fuese vencedor ni vencido porque nadie me explicara las reglas de este extraño juego. Cosa era de alegría verlos jugar cuando encendidos andaban y mucho más cuando las mujeres unas con otras jugaban que por carecer del referido artefacto hurgaban el orificio de su oponente con los dedos y aun con la lengua con lo que hubieran mucho placer y holganza. Y desta suerte todos iban quedando enlazados unos con otros que era de maravilla verlos que al cabo del rato no era posible distinguir unos cuerpos de otros. Y aunque no lo entendiese habría intervenido en aquel juego al que me convidaron de buenas maneras unos mancebos muy bien hechos de muy hermosos cuerpos y muy buenas caras si no fuera porque un fraile me indicase que aquello era cosa de idolatría e inteligencias con el maligno por lo que tornamos a salir a la intemperie donde aún se escuchaban las voces de contento que el tal juego produce.”
3 comentarios:
Cuando traeras el libro a Mexico, aqui lo he buscado y nada, sabes donde comprarlo?
lo siento Maria pero si no es a traves de amazon no se me ocurre otra cosa.
Buenisimo, como siempre me haces reir. Alguna vez deberias rese;ar La Odilea de Francisco Chofre.
Un saludote
Omar Six
Laguna Beach, CA
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