Miguel Cossío resume muy bien por qué no es posible una reforma migratoria profunda en Cuba de la mano de Raúl Castro:
Pero si alguna lección aprendieron el general y su hermano, el ahora compañero Fidel, de Alemania Oriental fue que abrir las compuertas derrumba el Muro que los sostiene, y que la más mínima apertura política sobre asuntos sensibles conduce a un desenlace similar al de Europa del Este y la desintegrada URSS. Para el general, los viajes y el intercambio libre entre cubanos de ambas orillas del estrecho de la Florida siguen significando un peligro mayor, que a corto plazo traen nocivas secuelas políticas al proyecto de hacer perdurar el régimen.
El Muro de Berlín cayó la tarde del mismo día (9 de noviembre de 1989), en que el portavoz del Comité Central del todavía gobernante Partido Socialista Unificado alemán (SED), Gunter Schabowski, anunció en una conferencia a la prensa internacional la nueva legislación que autorizaba a los alemanes del Este a viajar o emigrar al extranjero sin condiciones.