Programa del futuro

Lage, Pérez Roque con Oscar Haza en el programa “A mano limpia” cortesía de Tejuca:


Haza: ¿Y cuándo fue que ustedes descubrieron que aquello no tenía sentido?

Pérez Roque: No sé lo que piense Lage pero cuando yo leí en el Granma que el Comandante… que el dictador Castro decía que yo no había hecho sacrificio ninguno –yo, que había sacrificado todas mis neuronas, una a una, por la Revolución (ah, y las cuerdas vocales porque había que ver la gritería que yo armaba en los actos de la FEU por eso es esta ronquera permanente que tengo)- ahí me di cuenta de que todo eso no era más que un engaño.

Haza: Pero, eso fue después de 50 años de Castro en el poder, ¿cómo no se habían dado cuenta antes?

Lage: Déjeme explicarle señor Haza (y de paso agradecerle su invitación a un programa que admiro mucho y que no me perdía ni uno sólo cuando estaba en Cuba): el problema es que en Cuba es muy difícil tener acceso a la información y uno está totalmente aislado del mundo exterior. Por ejemplo, cuando la gente me hablaba de las colas que hacían para comprar luz brillante yo no les creía. ¿Cómo les iba a creer si yo a Chávez le cambiaba miles de barriles de petróleo por médicos todos los días? Cuando tuve que empezar a comprar gasolina en bolsa negra fue cuando me di cuenta de lo podrido que estaba aquel sistema. Y era difícil porque no sé si sabe que desde que caí en desgracia Chávez no me quiso mandar ni un barril de petróleo. Ni siquiera cuando le ofrecí a cambio un médico amigo mío.