La segunda parte
me va quedando un poco larga así que decidí convertirla en tres. La tercera la dejaré para mañana:
El olimpismo ya
no es lo que era. Y no lo digo porque ahora los atletas no sean amateurs. Los
de antes tampoco lo eran sólo que le pagaban en especie. Lo que se conocía como
amateurismo no era más que el medioevo del deporte: los únicos a los que les
estaba permitido ganar dinero era a los directivos del COI que por si fuera
poco fue fundado por un Barón, el de Coubertin. Se entiende entonces que Robin
Hood más que arquero aficionado se dedicara a asaltar caminos profesionalmente.
Ni siquiera creo que ahora Robin optaría por la arquería un deporte que la
gente no suele ir a ver ni aunque le paguen. Si se dedicara a algo sería al
fútbol para así quitarle el dinero a los pobres y dárselo a los ricos.
No, el mayor y
más lamentable cambio de los juegos olímpicos en las últimas décadas ha sido el
fin de la Guerra Fría porque si algo se extraña es la presencia del antiguo
bloque comunista. Los nazis también eran muy competitivos pero sólo les tocó la
olimpiada del 36. (La del 40 la ganaron y ya en la del 44 estaban perdiendo pero como sólo se compitió en tiro al blanco con artillería y en carreras de tanques el COI no las ha querido homologar). ¡Qué tiempos aquellos en los que el comunismo y el capitalismo
se jugaban su destino en una pista de atletismo o en una piscina! Y el
comunismo solía ganar apabullantemente con lo que queda demostrado que el
deporte no es un buen indicador de casi nada o que la Caída del Muro de Berlín es
un mito como el de los unicornios o el de los policías mexicanos honestos.
En aquellos
tiempos no había mujer que se atreviera a ganarle a aquellas atletas de la RDA
con más testosterona que Pancho Villa y algo menos de bigote. O viceversa. Un
partido de baloncesto o de hockey entre los Estados Unidos y la URSS era algo
así como la Crisis de Octubre con pelotas o bastones en lugar de cohetes pero mucha
más tensión y violencia. Y los equipos de gimnástica femenina soviéticos y rumanos. Eran
simplemente impecables, como el currículum vitae de la Madre de Teresa de
Calcuta. Uno veía la cara de los entrenadores, sus gestos, su carnet del
partido sobresaliendo del bolsillo y entendía las razones profundas por las que
todo funcionaba tan bien. En aquellos días Nadia Comaneci se bajaba de las
barras asimétricas y el entrenador la abofeteaba en nombre del camarada
Ceausescu. Y eso era para felicitarla después de una puntuación perfecta. Hoy
en cambio los entrenadores rusos y rumanos corren a abrazar y felicitar a sus
pupilas incluso si cayeron sentadas en la mesa de los jueces.
De aquello quedan
apenas recuerdos y los equipos de Cuba y Corea del Norte. Los cubanos de vez en
cuando patean un árbitro sospechoso de complicidad con el enemigo o muerden a
algún rival pero es más por inercia, por esos reflejos condicionados que se le van
creando a uno cuando ha hecho muchas colas en su vida que por convicción
ideológica. Los coreanos, bueno, son un caso aparte. Se comportan no como si el
Muro de Berlín siguiese intacto sino, como si no se hubiesen enterado que la
Guerra de Corea ya se acabó en empate. Seguro que los atletas se estarán
preguntando por dónde anda la delegación de la Unión Soviética o la de la RDA
con sus mujeres invencibles para pedirles consejo de cómo arreglarse el bigote.
Continuará
5 comentarios:
Ah, pero hubo juegos olímpicos?. Pa’ la otra avisen.
Lo bueno de estos juegos es que sin haberlos visto me muero de la risa con tu articulo.
Y tengo que esperar a mañana pa´la parte III, Asere? Jorge S
Hola Enrisco,
mira esto
http://www.youtube.com/watch?v=RJYEcvgCNJk&feature=related
y te empezarás a imaginar cuánto no se hizo y se hace con nuestros atletas de alto rendimiento de las EIDES, etc....No convirtieron a Maria Caridad Colón en un macho como al protagonista del video?
Un país pequeño, bloqueado, con más medallas de oro per cápita en el mundo, de qué color serán las pastillas que atesoran los archivos de Villa Marista?
Los juego solimpicos siguen siendo la gran fiesta del deporte...a pesar de que andan buscandose a si mismos en estos tiempos turbulentos. No hay otra fiesta ni habra otra fiesta y, en su conjunto, es un lindo evento aun si el boseo ha pasado a ser una verdader verguenza deportiva con sus almohadones y con esos referees que hacen politica (y tal vez dinero) con sus puntos. Y por otro lado, Enrisco, tu humor ha bajado su calidad. Yo lo atribuyo no a la falta de eso que te sobra, talento, sino a la falta de practica. No te dejes cohetear por esos criticones envidiosos que nunca dejaran de usar tu habilidad de escribir humor como un detrimento a tus otras habilidades en ensayo, ficcion, y teoria.
Deliciosos articulos, cargados de humor, de ensenanzas, de historia. Muy agradables leerlos.
Alguien sabe que paso con el blog de Octavo Cerco?
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