Siempre será una fecha complicada porque lo que parecía -y fue- punto de partida se convirtió con el paso del siglo en carrera de impulso para saltar al vacío. El recorrido que va de los versos de Eliseo Diego ("Tendrá que ver/ cómo mi padre lo decía:/ la República") a la pseudo república de la que en la escuela nos hablaban. Y en eso paramos: un pueblo tan atormentado por la realidad como por sus sueños. A veces más por sus sueños cumplidos que por los incumplidos. Tersites lo resume de manera inmejorable:
Uno se burla ahora del pobre Estrada Palma, de su traje de agente de pompas fúnebres, de su ilusión infantil, de su bigote, de sus zapatos huérfanos. Pero lo cierto es que hoy, en esa misma isla, el único futuro espléndido que la gente logra imaginar es poder largarse. Largarse a Cantón o Haití, a las Islas Canarias, a Polonia o al Líbano o a Galicia, pero largarse a un lugar donde uno pueda ser ingenuo, aunque en el fondo sepa que ningún futuro es espléndido. Tendría que ocurrírsele a alguien buscar esa estatua, donde quiera que esté, y ponerla de nuevo sobre sus pies destrozados, y tratar de comenzar de nuevo con la misma ingenuidad alelada que estrenó don Tomás Estrada Palma hace hoy 110 años y una eternidad.
3 comentarios:
Democracia, república, opciones políticas, Cuba tiene mucha necesidad de acceder a estas opciones. Solamente bajo la posibilidad de verdaderas opciones políticas y del espacio a la diversidad de ideas y a su implementación tendría sentido la verdadera reconciliación entre la isla y el destierro. Tendría entonces sentido hablar de un diálogo.
Las palabras de Tiresia tienen tanta verdad como las de su tocayo griego. Gracias, Enrisco, por traernos estas palabras y por tu blog.
triste realidad de los cubanos 110 anos de independencia y 50 sin libertad
Publicar un comentario