sábado, 10 de diciembre de 2022

Portugal- Marruecos: "vaya, tu leche de camella ahí"


Portugal venía del arrasar 6 a 1 a la hasta entonces sólida Suiza con triplete de la nueva estrella en el firmamento luso, Goncalo Ramos. Marruecos de un empate a cero con España que se decidió en una ronda de penales que España lanzó con la misma energía con que condena la violación de los derechos humanos en Cuba: ninguna. Parecía fácil hacer un vaticinio del choque entre Portugal y Marruecos. Pero como decía Borges, el destino ciego a las predicciones de los expertos futboleros es implacable con las distracciones de la defensa. Mientras en el primer tiempo los ataques incesantes de Portugal no encontraban camino claro a la puerta marroquí el delantero Youseff En-Nesyri aprovechó una mala salida del portero portugués para dar un salto monumental y cabecear un centro al interior de la portería ibérica.

En el segundo tiempo los consumidores de sardinas y bacalaos volvieron a la carga con renovados bríos, pero las ideas no muy claras. A los pocos minutos de reiniciado el partido el debatido Cristiano Ronaldo entró en juego dándole algo más de claridad al ataque sardínico pero no la suficiente para que los marroquíes perdieran la cabeza ni desdibujaran sus líneas defensivas. Como las hierbas durante un ciclón los ordeñadores de camellas se doblaban, pero no se partían. Si acaso los ataques lusos sirvieron de algo fue para darle lucimiento a Bono, el portero marroquí, tipo que sonreía tras cada atrapada como si en vez de un mundial de fútbol estuviera pasándose pelotas con el hijo en el patio de su casa.

Al final el marcador quedó igual, con el uno a cero que convierte a Marruecos en el primer país africano (revisar sus mapas, por favor) en llegar a semifinales y envió a Ronaldo a las duchas, anegado en llanto. Sin embargo, siendo Ronaldo, como es, un pésimo actor de cine mudo no le quedaba claro a uno si en verdad lloraba o iba muerto de la risa de ver lo mal que le había ido a Portugal por haberse atrevido a prescindir de él durante 50 minutos.

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