De cara a cuartos

De vuelta para comentar lo que serán los cuartos de acuerdo a lo que pasó en los octavos. Es de sospechar que la final saldrá de los ganadores entre Argentina- Alemania y Holanda- Brasil. Lo demás es aliño para que después no digan que se trata de un tope bilateral entre Europa y Sudamérica con dos equipos por bando. Los uruguayos, si se aplican lo suficiente contra Ghana, podrán llegar a una semifinal por primera vez desde que se inventó la televisión y cuando caigan derrotados en semifinales regresarán a casa haciendo cálculos sobre su diferencia poblacional con el equipo que los derrotó. (Si alguna ventaja tiene un país pequeño es que a la hora de la derrota ofrece todo tipo de consuelos). Los españoles tendrán frente a sí a los aguerridos guaraníes, un equipo cuya única estrategia será llegar a la tanda de penales o refugiarse en los mismos consuelos poblacionales que sus vecinos uruguayos. Pero España, posiblemente el equipo más equilibrado del campeonato, hasta ahora lo único que ha demostrado (además del bendito noviazgo de Villa con el gol) es su capacidad para pasarse la bola alrededor del círculo central que es la definición de Gran Fútbol para los que descubrieron ese deporte hace tres semanas o tuvieron la inefable fortuna de haber nacido en España.