Blog personal y casi tan íntimo como una enfermedad venérea pensado también para liberar al pueblo cubano, aunque sea del aburrimiento. Contribuyentes: Enrisco (autor de “Obras encogidas” y “El Comandante ya tiene quien le escriba”), su alter ego, la joven promesa de más de cincuenta años, Enrique Del Risco. Espacio para compartir cosas, mías y ajenas, aunque prefiero que sean ajenas. Quedan invitados a hacer sus contribuciones, y si son en efectivo, pues mejor.
viernes, 6 de mayo de 2016
Una vez como tragedia...
3 comentarios:
Nausea
dijo...
Pues claro. Porque lo que hace falta en Cuba es dar desfiles de haute couture (cerrados al vulgo, por supuesto) para elevar un poco el nivel cultural (algo tan importante para el cardenal Ortega) aunque sea por ósmosis. Pero yo creo que deben ir más lejos y equipar avionetas para rociar a toda Cuba con Chanel No. 5, lo cual sería espectacular. Lástima que Alfredo Guevara no haya vivido para verlo.
Y dicho sea de paso, si este chiquito no es tremendo comemierda, bastante que lo parece. Los Castro aparentemente han perdido el sentido de lo ridículo, si es que alguna vez lo tuvieron, porque entre Fidel en mamarrachos de Adidas y este hijito de hijito de papá con sus cejas estrafalarias y sus pujos de modelo, la verdad que hay que tener gandinga para exhibirse en público.
3 comentarios:
Pues claro. Porque lo que hace falta en Cuba es dar desfiles de haute couture (cerrados al vulgo, por supuesto) para elevar un poco el nivel cultural (algo tan importante para el cardenal Ortega) aunque sea por ósmosis. Pero yo creo que deben ir más lejos y equipar avionetas para rociar a toda Cuba con Chanel No. 5, lo cual sería espectacular. Lástima que Alfredo Guevara no haya vivido para verlo.
y ese quien es? el nieto del susodicho?
Y dicho sea de paso, si este chiquito no es tremendo comemierda, bastante que lo parece. Los Castro aparentemente han perdido el sentido de lo ridículo, si es que alguna vez lo tuvieron, porque entre Fidel en mamarrachos de Adidas y este hijito de hijito de papá con sus cejas estrafalarias y sus pujos de modelo, la verdad que hay que tener gandinga para exhibirse en público.
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