viernes, 13 de mayo de 2016

Rectificación


A los que insisten con el chistecito ese de que en el comunismo te quitan las dos vacas que tienes y te dan un poco de leche: ¡qué bien se ve que no han vivido en el comunismo!
Es cierto que en el comunismo te quitan las vacas para enseguida anunciarte que te van a dar leche. Y no solo eso, sino que vas a tomar más leche que nunca y luego no sabrás qué hacer con tanta cantidad de lácteo. De hecho mandas a tu hijo a estudiar a una universidad –ahora gratuita- para que se especialice en producción de quesos. Eso es al principio. Luego al que pregunte por las vacas o por la leche lo fusilan, acusado de agente de la CIA. Al rato la carne o la leche dejan de ser cosas reales para convertirse en chistes de los que la gente se ríe bajito. Luego a la gente se le olvida esa idea de comer carne y tomar leche o de preguntar por ellas no vaya a ser que le quiten la yerba que comen (racionadamente). ¡Y agradecidos que están por la yerba porque es mejor que en el capitalismo que era una época en la que la yerba era para los ricos y había unos animales terribles llamados “vacas” que se comían a los niños! Y hablando de niños, tus hijos se graduaron de maestros queseros suma cum laude pero como no había leche con la que hacer quesos decidieron irse del país (clandestinamente por supuesto) hacia el capitalismo, ese sitio atrasado donde las vacas todavía se dedican a dar carne y leche y a los ricos les ha dado por comer tofu.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y a alguien le parecera incluso gracioso.