Dios los cría y el Partido los junta

Hugo Cancio, el Dalai Lama de Jayalía le escribe a Su Eminencia para juntos concluir la labor de reconciliar a todos los cubanos previo exterminio de los gusanos, claro. (Hay que ver el amor que le inspira a esta alma siboneya cualquier ser humano excepto si le llevan la contraria). Y más ahora que el Hermano en Jefe aprovecha una cumbre de Cubazuela para anunciar el próximo congreso del Partido. ¿Hugo Cancio ya sabrá que en el nuevo Comité Central el cardenal está propuesto para presidir el departamento ideológico (y de paso hacerle competencia a Eusebio Leal en el control de La Habana Vieja) y querrá saber qué le toca? ¿Podrá aspirar al puesto de jefe de cultura en el exterior? Porque de eso se trata el nuevo congreso: una vez que se ha hecho la repartición física del país informarles qué parte les toca que no sea necesariamente espiritual. Ya Cuba cambió y hay gente que todavía se está enterando.

[La ilustración, por supuesto, en Guamá]