Lo confieso: yankista de toda la vida me he pasado el último mes siguiendo día a día los resúmenes de los juegos de los Dodgers. Más exactamente el desempeño del novato Yasiel Puig que acaba de cerrar su primer mes con una cantidad de hits sólo superada entre los novatos por un muchachito llamado Joe Dimaggio. Puig es un tipo que todo lo hace bien y ha jugado hasta ahora con un ímpetu rarísimo en un terreno de pelota, como si quisiera reinventar el deporte. Y así tiene convencidos a los espectadores que cada día es una fiesta verlo jugar, que algún truco nuevo se sacará de la manga: lo mismo llega hasta segunda con un sencillo, que se estrella contra la pared y se levanta sacudiéndose como si fuera Hulk que fulmina a un corredor con un disparo tan duros como certero, o intenta demostrar que es más rápido que la pelota, o decide un juego practicamente solo. O como anoche que bateó de cinco cuatro para hacerle sombra al fantasma de Dimaggio joven. Casi que da igual hasta cuándo le dure la racha -aunque su talento hace sospechar que su racha es de las de toda la vida- lo que es incambiable es que este mes ha sido mágico.
Abajo el video de un aficionado:
