Esta noticia se caía de la mata: tanto Chávez hablar de su enfermedad, tanto dejar que se especulara sobre su alejamiento del poder para aparecerse en Caracas de sorpresa. Viejos trucos aprendidos de su jefe: cuando la cosa está mala mantenerse callado y justo antes de recuperarse crear falsas esperanzas a los que les gustaría verlo del otro lado. Pero la gente no aprende y siempre se las arregla para sorprenderse como si fuera la primera vez.
Blog personal y casi tan íntimo como una enfermedad venérea pensado también para liberar al pueblo cubano, aunque sea del aburrimiento. Contribuyentes: Enrisco (autor de “Obras encogidas” y “El Comandante ya tiene quien le escriba”), su alter ego, la joven promesa de más de cincuenta años, Enrique Del Risco. Espacio para compartir cosas, mías y ajenas, aunque prefiero que sean ajenas. Quedan invitados a hacer sus contribuciones, y si son en efectivo, pues mejor.
lunes, 4 de julio de 2011
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3 comentarios:
¡Verdad! :-)
Tanto razón. Ahora a limpiar la casa de posibles traidores. Ya se verá. Como dices, este es un truco viejo del librito de Fidel Castro.
Seamos optimistas: ese culo no tiene remedio, y el mandril de Barinas sólo volvió para morir en casa.
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