Este período de tiempo que quizás dentro de unos años se conozca como “el bloggerato” creo que nos ha servido a todos los habitantes de este país virtual que nos hemos inventado para hacernos una idea de los alcances y limitaciones de los blogs. De un lado su independencia, y flexibilidad, la gran variedad de temas que toca, de espacios que cubre y de posiciones que proyecta, su capacidad para burlar una censura acostumbrada a lidiar con unos pocos emisores de opinión, de organizar la información, hacerla más asequible a los lectores y la de fomentar una discusión que con el tiempo se va haciendo más madura y hasta donde cabe, más productiva. Las limitaciones teniendo en cuenta la limitación de medios, la carencia en la mayor parte de los casos de fuentes directas de información, el amateurismo de la gran mayoría de los creadores de blogs (no estoy seguro si a los del Herald le pagan por ello) y el escaso acceso de los cubanos en la isla al Internet nos limitan en casi todos los casos a la selección y análisis de información (que no es poco) y hace que nuestro impacto entre los lectores de la isla sea mucho menor de lo que nos gustaría pensar y de lo que nos sugiere la preocupación real que demuestran las autoridades de la isla.
A los que insisten en las limitaciones siempre les hablo de la futura nostalgia que sentiremos por los tiempos en que a diario podíamos acceder gratuitamente a textos de Jorge Ferrer, Duanel Díaz (cuya salida del aire lamento todavía) o Manuel Sosa, el inteligente revolver de archivos de los Miquis, Connie, Mauricio Pimienta, Éufrates del Valle, los comentarios de Camilo, El Abicú, Barbarito, Generación Asere o Yoani o la labor simplemente aplastante de un Baracutey Cubano o de Ernesto Hernández Busto a quien no se le debe escatimar los méritos de ser la principal referencia en la vorágine de blogs que nos sacude en los dos últimos años. (Le ruego a todos los que dejo afuera que me disculpen. Como diría Corleone: nada personal).
La extraña situación que se generó alrededor de los estudiantes de la Universidad de Ciencias Informáticas es una buena oportunidad para que los bloggeros repensemos nuestras funciones ya sea para reformularlas o para persistir en ellas. Pensemos por ejemplo en las características en las que aventajamos a cualquier periodista oficial cubano o a cualquier corresponsal extranjero en Cuba. Sobre los primeros tenemos las ventajas que nos ofrece la libertad mientras que a los segundos los aventajamos en un conocimiento mucho más profundo del sujeto en cuestión. Los bloggers cubanos generarán muy poca información nueva pero en cambio han ayudado a establecer una nueva jerarquía de lo que es realmente relevante en un medio que conocemos con dolorosa precisión . Luego de haber asistido a escenas similares en la segunda mitad de los 80 o inicio de los 90 a ninguno nos debió sorprender las opiniones y preguntas hechas por los estudiantes ni el tartamudeo mental de Alarcón. Interesaba, eso sí, que esta vez tuviéramos constancia audiovisual del hecho a nuestra disposición y no a la de los segurosos de siempre. Difundir esas imágenes para que no fueran sólo del consumo de unos cuantos curiosos y a diferencia de las imágenes de la caída del muro del Berlín, el fusilamiento de Ceaucescu o los debates de la facultad de periodismo en el 87 en Cuba no fuera monopolio exclusivo del Comité Central. No hay nada criticable en eso sino todo lo contrario. De cualquier forma el conocimiento que tenemos del terreno podría habernos evitado errores elementales de apreciación. Tomas frontales y perfectamente coordinadas no pueden ser anunciadas como un video clandestino aunque su copia lo sea. Tampoco era difícil imaginarse que el gobierno no detendría a un estudiante sólo por decir enfrente de un representante del gobierno lo que este había pedido que dijera y menos luego de la amplia difusión que se le habían dado a sus palabras. De haberse puesto en contacto con la prensa extranjera o con grupos disidentes el asunto hubiera sido distinto pero eso nunca ocurrió. Tampoco hay que imaginar torturas para llevar a los estudiantes al desmentido grosero de sus propias palabras días antes. No es difícil imaginarse la situación: se le acercan al muchacho diciéndole que la contrarrevolución o la CIA lo han tomado de bandera. Se le muestra una selección de los telediarios de varios sitios presentándolos como disidentes y se les pide que “aclaren” su situación. En Cuba cualquiera sabe lo que eso significa. La apabullante ignorancia de esos muchachos que les permite decir sin sonrojos que en ninguna otra parte del mundo un hijo de obreros y campesinos no podría llegar a la universidad no les impide entender la gravedad de su situación. De no “aclararse” irían directamente a dar al campo enemigo en el que no tienen ningún asidero y desconocen a la perfección. Perderían cuando menos su condición de personas en un país en esta es un privilegio sólo al alcance de los fieles al sistema cuando no irían a la cárcel. Eso lo entiende cualquiera que haya crecido en Cuba hasta su adultez. La alarma sin embargo está justificada. El régimen cambia -al menos de dueño- y no estamos seguros si eso redunde en un tratamiento menos inteligente de los elementos díscolos, en la represión directa y brutal por hacer justo lo que el propio régimen ha pedido, que se haga una crítica al sistema para mejorarlo. Los familiares de uno de los estudiantes también andan preocupados por el destino de este y cuando el tiempo apremia el prurito de precisión informativa se flexibiliza: nadie quiere dejar pasar la oportunidad de ayudar ante un peligro inminente sólo porque cierta ética profesional (de una profesión que prácticamente es un hobby) se lo desaconseja. Las declaraciones de los estudiantes pueden parecerle a alguien una burla al esfuerzo de los bloggers que le dieron seguimiento a este caso. Yo más bien lo veo como una confirmación de ese seguimiento. Ese desmentido montado a la carrera es una confirmación de que la actividad de los blogs y sus repercusiones en la prensa preocupa a las autoridades cubanas más de lo que les gustaría admitir y harán todo por desprestigiarlos. En lo básico no hay nada que objetarles a los blogs. Algo habrá que aprender no obstante y en este caso creo que la lección está en que a pesar de la premura o la angustia no deben descuidarse ciertos detalles, esos que desobedecen esa extraña lógica que los años en Cuba nos obligaron a aprender, ese aprendizaje que todavía hace que desde Cuba no nos vean como extraños.
A los que insisten en las limitaciones siempre les hablo de la futura nostalgia que sentiremos por los tiempos en que a diario podíamos acceder gratuitamente a textos de Jorge Ferrer, Duanel Díaz (cuya salida del aire lamento todavía) o Manuel Sosa, el inteligente revolver de archivos de los Miquis, Connie, Mauricio Pimienta, Éufrates del Valle, los comentarios de Camilo, El Abicú, Barbarito, Generación Asere o Yoani o la labor simplemente aplastante de un Baracutey Cubano o de Ernesto Hernández Busto a quien no se le debe escatimar los méritos de ser la principal referencia en la vorágine de blogs que nos sacude en los dos últimos años. (Le ruego a todos los que dejo afuera que me disculpen. Como diría Corleone: nada personal).
La extraña situación que se generó alrededor de los estudiantes de la Universidad de Ciencias Informáticas es una buena oportunidad para que los bloggeros repensemos nuestras funciones ya sea para reformularlas o para persistir en ellas. Pensemos por ejemplo en las características en las que aventajamos a cualquier periodista oficial cubano o a cualquier corresponsal extranjero en Cuba. Sobre los primeros tenemos las ventajas que nos ofrece la libertad mientras que a los segundos los aventajamos en un conocimiento mucho más profundo del sujeto en cuestión. Los bloggers cubanos generarán muy poca información nueva pero en cambio han ayudado a establecer una nueva jerarquía de lo que es realmente relevante en un medio que conocemos con dolorosa precisión . Luego de haber asistido a escenas similares en la segunda mitad de los 80 o inicio de los 90 a ninguno nos debió sorprender las opiniones y preguntas hechas por los estudiantes ni el tartamudeo mental de Alarcón. Interesaba, eso sí, que esta vez tuviéramos constancia audiovisual del hecho a nuestra disposición y no a la de los segurosos de siempre. Difundir esas imágenes para que no fueran sólo del consumo de unos cuantos curiosos y a diferencia de las imágenes de la caída del muro del Berlín, el fusilamiento de Ceaucescu o los debates de la facultad de periodismo en el 87 en Cuba no fuera monopolio exclusivo del Comité Central. No hay nada criticable en eso sino todo lo contrario. De cualquier forma el conocimiento que tenemos del terreno podría habernos evitado errores elementales de apreciación. Tomas frontales y perfectamente coordinadas no pueden ser anunciadas como un video clandestino aunque su copia lo sea. Tampoco era difícil imaginarse que el gobierno no detendría a un estudiante sólo por decir enfrente de un representante del gobierno lo que este había pedido que dijera y menos luego de la amplia difusión que se le habían dado a sus palabras. De haberse puesto en contacto con la prensa extranjera o con grupos disidentes el asunto hubiera sido distinto pero eso nunca ocurrió. Tampoco hay que imaginar torturas para llevar a los estudiantes al desmentido grosero de sus propias palabras días antes. No es difícil imaginarse la situación: se le acercan al muchacho diciéndole que la contrarrevolución o la CIA lo han tomado de bandera. Se le muestra una selección de los telediarios de varios sitios presentándolos como disidentes y se les pide que “aclaren” su situación. En Cuba cualquiera sabe lo que eso significa. La apabullante ignorancia de esos muchachos que les permite decir sin sonrojos que en ninguna otra parte del mundo un hijo de obreros y campesinos no podría llegar a la universidad no les impide entender la gravedad de su situación. De no “aclararse” irían directamente a dar al campo enemigo en el que no tienen ningún asidero y desconocen a la perfección. Perderían cuando menos su condición de personas en un país en esta es un privilegio sólo al alcance de los fieles al sistema cuando no irían a la cárcel. Eso lo entiende cualquiera que haya crecido en Cuba hasta su adultez. La alarma sin embargo está justificada. El régimen cambia -al menos de dueño- y no estamos seguros si eso redunde en un tratamiento menos inteligente de los elementos díscolos, en la represión directa y brutal por hacer justo lo que el propio régimen ha pedido, que se haga una crítica al sistema para mejorarlo. Los familiares de uno de los estudiantes también andan preocupados por el destino de este y cuando el tiempo apremia el prurito de precisión informativa se flexibiliza: nadie quiere dejar pasar la oportunidad de ayudar ante un peligro inminente sólo porque cierta ética profesional (de una profesión que prácticamente es un hobby) se lo desaconseja. Las declaraciones de los estudiantes pueden parecerle a alguien una burla al esfuerzo de los bloggers que le dieron seguimiento a este caso. Yo más bien lo veo como una confirmación de ese seguimiento. Ese desmentido montado a la carrera es una confirmación de que la actividad de los blogs y sus repercusiones en la prensa preocupa a las autoridades cubanas más de lo que les gustaría admitir y harán todo por desprestigiarlos. En lo básico no hay nada que objetarles a los blogs. Algo habrá que aprender no obstante y en este caso creo que la lección está en que a pesar de la premura o la angustia no deben descuidarse ciertos detalles, esos que desobedecen esa extraña lógica que los años en Cuba nos obligaron a aprender, ese aprendizaje que todavía hace que desde Cuba no nos vean como extraños.
Ha sido una auténtica lección bloggistica, Maestro. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarAconsejo a todo el mundo su lectura y relectura.
"Barbarito, el lector cubano"
Voy de eco en esa: "Las declaraciones de los estudiantes pueden parecerle a alguien una burla al esfuerzo de los bloggers que le dieron seguimiento a este caso. Yo más bien lo veo como una confirmación de ese seguimiento. Ese desmentido montado a la carrera es una confirmación de que la actividad de los blogs y sus repercusiones en la prensa preocupa a las autoridades cubanas más de lo que les gustaría admitir y harán todo por desprestigiarlos."
ResponderEliminarLo malo de esta historia no es que los muchachos de la UCI hicieran el Galileo, sabíamos que era eso lo que ocurriría, sino como no pocos blogs y bloggeros lo asumieron como una especie de derrota. ¿Qué querían? ¿A los chamas aún en calabozo psiquiátrico para pedir su libertad?
Buena reflexion sobre el efcto de los blogs y buen titulo ese de "bloggerato".
ResponderEliminarenrisco, excelente post, gran lección para todos. ojalá algo en esta historia bloguera comience a cambiar entre los cubanos: es la posibilidad de debatir ideas y no de tratar de imponerse con las ofensas. si algo triste pasa en estas historias de blogs, desmentidos, denuncias, yo dije y tú no, cuando llegaste al exilio, etc, es que algunos basan su debate en la ofensa personal entre los blogueros y comentaristas, y no en el debate de conceptos. esto nos ayudará mucho para el futuro, cuando en vez de los blogs estemos discutiendo abiertamente en algún medio de la isla sobre la realidad cubana. gran trabajo, hermano.
ResponderEliminarCerterísimo análisis.
ResponderEliminarBueno, yo siempre tengo pegas, yo hubiera terminado la frase "para hacernos una idea de los alcances y limitaciones de los blogs" con "tal como los conocemos hoy". Porque esto seguirá evolucionando y técnicamente se pondrá a la altura de los más exigentes. Mira hoy mismo apareció otra función para elegir una identidad en los comentarios, que no tengo ni puta idea de paqué sirve, pero esta cosa se puede convertir en una poderosa herramienta de información, precisamente de toda aquella información que no sale en los medios tradicionales. Por ejemplo si Tejuca expuso o Risqui cogió un premio o publicó un libro. Yo no me hubiera enterado si no es por los blogs, porque en los medios tradicionales sólo salen unas pocas noticias del gran conjunto informativo que es la humanidad.
En cuanto a los demás de tú análisis, mejor imposible.
tiene razon el autor, las "horas dictadura" que cargamos al hombro, nos hicieron sospechar el final de la historia y su trama, muy a pesar de que hubieramos preferido otro desenlace.
ResponderEliminaren penultimos dias descubri que el muchacho es uno de los que "vigila la red" y hace informes periodicos, a lo que te llevan por mantenerte cerca de una computadora.
Enrisco, tengo un primo recien llegado de Cuba, Carlos de Las Cuevas, entre los tesoros que trajo de la Habana estaba un cd con la compilacion de tus escritos en Encuentro, inutil del lado de aca, pero recuerdo de sus pequennas conspiraciones, de mano en mano se los pasaban, asi que suenan los blogs, a pesar de...
Excelente estimado Enrisco! Lo has resumido con precision de cirujano. Y menos mal que hoy hablas en serio...
ResponderEliminarGracias por mencionar a El Imparcial; mira, gracias a este post tuyo me entero ahora que me lees. Fijate la importancia de los blogs! (lol)
El comentario de los miquis es muy valido. Lo importante no es quien dijo o no dijo, tenemos que dejar los egos a un lado y mirar con luz larga toda la importancia que los blogs estan teniendo, para que en Cuba los jovenes sepan que no estan solos.
Esto de los Blogs,es un tiro al blanco,y debemos apoyarlos,yo en lo personal los tengo como punto de referencia y pienso que la supuesta aclaracion tan urgente"de Eliecer,sobre su participacion en el encuentro con Alarcon,fue debido a la respuesta inminente de los bloggers
ResponderEliminarMuy bueno este comentario Enrisco, el mejor hasta el momento en toda la blogosfera cubana. Sin ñoñeria solidaria, ni paternalismo ramplón, pero sí objetividad certera. Las cosas son como son y no como yo quiera que sean.
ResponderEliminarChapeau!
La partiste.
ResponderEliminarCompletamente de acuerdo contigo, Henry. También con los comentaristas, por supuesto.
ResponderEliminarMas alla del debate entorno al arresto de Eliecer lo que estaba planteado en mi opinion era un problema etico.
ResponderEliminarLas mismas reglas de apego a la verdad y respeto a los lectores aplican asi se escriba para el NY Times, un blog o en papel de cartucho. Es cierto que la dinamica de los blogs es distinta pero esto no deberia usarse como argumento o justificación para hacer periodismo sensacionalista.
En honor a la verdad la mayoria de los bloggers mostraron madurez en el tratamiento de la noticia de marras.
Lo lamentable es que el problema va mas alla de la blogosfera. Desde aquel famoso reporte de la “toma del puerto de Bayamo”, cuando lo de Giron, la inmensa mayoria de los medios cubanos en el exilio, y algunos no tan cubanos, han estado tomando los deseos por realidades.
La ironia de todo esto es que combatiendo a la desinformacion de los medios castristas han terminado por parecérseles. Junto a un catecismo politico aburrido y machacon, practican la sobredimension de hechos y personajes intrascendentes, ademas de la descalificación de todo el que piensa distinto. Al final terminan cocinandose en su propia salsa. Mas alla de un sector limitado en lo social y lo geografico, no tiene mayor impacto, ni tampoco ninguna credibilidad dentro de la población en Cuba. La persistencia en esa actitud a lo largo de todos estos annos es realmente admirable.
Los blogs tienen el potencial para hacer la diferencia en la medida que esten concientes de sus propios limites y errores y sean capaces de separarse de ese enfoque tan estrecho. El impacto en la joven generacion cubana aumentara con la expansion del acceso a Internet en Cuba, algo que nadie puede parar a la larga.
Por ultimo aquellos impacientes o con excesivo afan de protagonismo no deberian olvidar las sabias palabras de la Dra. Mariela Castro, y cito: “la publicación apresurada
de noticias y rumores es la eyaculacion precoz del periodismo”
Ya sabemos lo que ocurre en esas circunstancias, hay un placer momentaneo pero a larga la opinión publica queda insatisfecha.
Salvador pi
Don Enrisco, la boto pa'lacalle. Usted es un sabio, lo de sabio no es porque sepa mucho o poco que seguro sabe un monton, sino por la capacidad serena de ejercer el sentido comun el menos comun de los sentidos.
ResponderEliminarAprendiendo, aprendiendo y aprendiendo. De acuerdo con las limitaciones de los blogs, pero "un blog vale lo que vale el blogero hace en el" parodiando a quien tu sabes. La busqueda de protagonismos, los insultos o "indirectas", las justificaciones o incompresiones a desde tiempo y realmente superficiales a mi me dejan un sabor bien amargo. Si alquien es un maestro del periodismo se le agradece que comparta su ideas con nosotros que no lo somos y merece respeto; pero si otro [como un servidor] es solo un tipo que entre una cosa y la otra para ganarse honestamente la vida cuelga una noticia o un "comentarito" con la unica pretension de decir estoy aqui y quiero contribuir en la medida de mis posibilidades, tambien se le agradece y debe merecer igualmente respeto.
Entre las cosas sabias tambien que Los Miquis expresan esta esa de que "...algunos basan su debate en la ofensa personal entre los blogueros y comentaristas, y no en el debate de conceptos". Creo es una idea meridiana. En ocasiones me sucede que no se si estoy en Kaos o en un blog de un cubano. La naturaleza de los comentarios anda algunas veces por el mismo camino. Probablemente usted que es sabio me pueda aclarar si es la "naturaleza" del cubano o es una mutacion viperina.
gracias. como diria un ex socio (no me habla pero lee esto de vez en cuando): tanto carinno me confunde. veo las imagenes de los argumentos y contra argumentos de los estudiantes de la UCI, sus afirmaciones y arrepentimientos y lo que mas me llama la atencion es, en contraste con su actualizacion tecnologica, su brutal ignorancia respecto a lo que ocurre en el mundo. no debo ignorar, no obstante que alguna vez comparti esa ignorancia y todavia me recuerdo preguntandole a una estudiante mexicana de la UNAM cuanto pagaba por la universidad. la verguenza que senti cuando me dijo con la mayor naturalidad que apenas pagaba unos simbolicos pesos por la matricula todavia me persigue. ignoran tambien su propio pasado en el que por ejemplo la mitad de la matricula era gratuita gracias a lo cual recibian educacion superior miles de hijos de obreros y campesinos. Y Alarcon puede decir tranquilamente que su familia nunca se pudo dar el lujo de ir a Varadero (cuando mi familia, tambien de Camaguey, bastante mas pobre que la suya lo podia hacer) o que en las tiendas de la Quinta Avenida no pueden entrar todos y no recibir un abucheo atronador. con todo eso -que ahora nos parece tan elemental- hay que lidiar.
ResponderEliminargracias. como diria un ex socio (no me habla pero lee esto de vez en cuando): tanto carinno me confunde. veo las imagenes de los argumentos y contra argumentos de los estudiantes de la UCI, sus afirmaciones y arrepentimientos y lo que mas me llama la atencion es, en contraste con su actualizacion tecnologica, su brutal ignorancia respecto a lo que ocurre en el mundo. no debo ignorar, no obstante que alguna vez comparti esa ignorancia y todavia me recuerdo preguntandole a una estudiante mexicana de la UNAM cuanto pagaba por la universidad. la verguenza que senti cuando me dijo con la mayor naturalidad que apenas pagaba unos simbolicos pesos por la matricula todavia me persigue. ignoran tambien su propio pasado en el que por ejemplo la mitad de la matricula era gratuita gracias a lo cual recibian educacion superior miles de hijos de obreros y campesinos. Y Alarcon puede decir tranquilamente que su familia nunca se pudo dar el lujo de ir a Varadero (cuando mi familia, tambien de Camaguey, bastante mas pobre que la suya lo podia hacer) o que en las tiendas de la Quinta Avenida no pueden entrar todos y no recibir un abucheo atronador. con todo eso -que ahora nos parece tan elemental- hay que lidiar.
ResponderEliminarEn talla con la reflexión de Enrisco y sobran las razones para interpretar el suceso ‘UCI’ positivamente.
ResponderEliminarEn el último video que postea granma digital, el alumno Eliécer Ávila repite ‘en tono de casting’ los enunciados de un guión donde se aprecia el verdadero miedo del gobierno de la isla:
“...la Guerra Mediática...” menciona primero el estudiante y luego agrega “... la dimensión y gran cantidad de artículos y de información, asociada a varios temas del país...”
¡touche'!
¿Ahhhh, es que estamos envueltos en una guerra ‘mediática’? Pero los bloggers, no somos un Monopolio informativo, no pertenecemos o a un partido y tampoco nos paga el Imperialismo yankee ... Eso de que el gobierno de Cuba se sienta amenazado y obligado a desmentir algo, ante la bulla de un grupo de bloggueros en el exterior, es una victoria política y descubre más que nada su propia inhabilidad para lidiar con un clima de libertad de expresión verdadero, sin dudas inexistente hoy en el interior de la isla.
Coñoó, ante todo gracias por la mención.:) Y nada, si hay algún amateur por ahí somos nosotros.
ResponderEliminarLos bloggers son un peligro para la imagen de aquel régimen cerrado, que a la carrera y con incidentes como estos, toma lecciones de la repercusión que ahora pueden tener sus tradicionales jugadas propagandísticas en un mundo cada vez más abierto y libre.
El BLOG es un fenómeno social con repercusiones mundiales y por ende un arma política a tomar en cuenta debido a sus crecientes posibilidades de difundir INSTANTÁNEAMENTE y ante millones de lectores, tanto informaciones, como vivencias, opiniones y debates sobre del tema cubano. Esta nueva realidad, que implica la presencia constante de nuestros blogueros en la red de Internet, trasciende al impacto ‘local’ de las tradicionales tribunas del exilio cubano (radio, televisión, prensa plana, etc.) y abre nuevas avenidas para plantear en un contexto global la necesidad urgente de cambios políticos en Cuba.
Nos vemos,
g.a.
caballero, dejemos tranquilo de una vez al compañerito Eliecer, bastante tendra ya con su proximo servicio social alla en el Club de Computacion de la Punta de Maisi.......al ladito del faro.
ResponderEliminarYo veo a los blogs más como una ventana desde la cuel el mundo exterior puede concer Cuba. Nadie mejor que nosotros que hemos sido testigos y actores de cada minuto hasta nuestra adultez para aclarar a los que de bene fe nos miran desde afuera. Por eso creo que hay que medir y comparar lo que queremos que sea con lo que hemos vivido antes de soltar las campanas al viento. Pues perdemos credibilidad.
ResponderEliminarMuy acertado post. Por eso ha generado tan acertados comentarios.
ResponderEliminarLo unico que se me ocurre decir que no recuerdo haberlo leido aqui es que los blogs tienen dos funciones fundamentales en el sentido que nos ocupa: Difundir informacion y dar la opinion de su autor. Ambas igualmente importantes. En ambos casos se aplican los mismos principios eticos mencionados por Enrisco.
Privilegiados los que tenemos que aprender, porque no es dificil. Abundan los buenos maestros.
Privilegiados tambien por compartir este momento excepcional.
Arriba blogero! Aprieta y dale a los pedales!
Saludos,
Al Godar