jueves, 17 de octubre de 2013

Definiciones

"Padura isn’t a dissident, in the way of Solzhenitsyn, but neither is he just an entertainer" dice Jon Lee Anderson, el "especialista" en temas cubanos en la revista New Yorker, gracias a que escribió una biografía del Che. Esa es una definición en la que cabría toda la UNEAC y personal aledaño. Probar por ejemplo con "Miguel Barnet no es un disidente a la manera de Solzhenitsyn pero tampoco se dedica sólo a entretener". "Silvio Rodríguez no es un disidente a la manera de Solzhenitsyn pero tampoco se dedica sólo a entretener", "Heras León no es un disidente a la manera de Solzhenitsyn pero tampoco es entretenido leerlo" etc.

7 comentarios:

  1. Si, llevas toda razón, la cultura cubana descafeinada y tergiversada. Buen comentario, mordaz y puntual.

    ResponderEliminar
  2. Los que compren al Anderson como experto en asuntos cubanos no merecen otro entretenimiento que leer obra de escritores de la UNEAC. La verdad que es impresionante lo lejos que puede llegar un farsante, y este tipo no es ni siquiera farsante de envergadura, sino uno mas del montón.

    ResponderEliminar
  3. Colorete, si fuese un farsante de envergadura podria ser hasta presidente de los EEUU, como muestra la actualidad.

    ResponderEliminar
  4. Manolín regresa definitivamente a La Habana y por ahora se le otorgará la categoria de "personal aledaño". hasta que no haga los tramites en la Oficoda y se vuelva a inscribir en el CDR no se le devolverá el carnet de la UNEAC....a menos que pague en fulas las cuotas atrasadas o Pachito Alonso declare que el siempre fue un kini kini que lo confundieron con kleenex.

    ResponderEliminar
  5. Padura es un fiel reflejo de su cultura (es un decir), o sea, la "cultura" castrista. Desgraciadamente, es además un reflejo del eterno oportunismo cubano: un clásico camaján.

    ResponderEliminar
  6. Pero el artículo en el New Yorker no es para nada favorable a Cuba. No se si lo han leído pero tiene una mirada muy crítica del régimen cubano. Creo que es muy saludable para el lector del New Yorker que no sabe nada de Cuba o tiene una mirada muy exótica sobre la isla.

    ResponderEliminar
  7. Tienes toda la razón ano. 20/10/13 16:41. El artículo es crítico hacia Cuba y hacia Padura. No dice nada muy diferente sobre éste último de las opiniones vertidas aquí, que esencialmente su "disidencia" se basa en críticar al régimen dentro del marco permitido por la censura. Saludos.

    ResponderEliminar