Nube de palabras del discurso de Fidel Castro anunciando campaña de alfabetización el 10 de octubre de 1960 |
No se crean que el chicharrón es carne. La famosa campaña de alfabetización de 1961 fue planeada desde el comienzo como una operación militar: se enviaron miles de alfabetizadores a territorio en pie de guerra para que sirvieran lo mismo de evangelizadores de las bondades de la revolución, de informantes sobre el movimiento de las guerrillas enemigas que de mártires en potencia.
El discurso donde Fidel Castro anuncia que llevará adelante la campaña de alfabetización es de hecho el despliegue de un plan de batalla: por las veces que se mencionan las palabras "maestros" (28), "escuela" (15), "enseñar" (11), "libros" (9) y "cartilla" (5) “estudiantes” (4) se menciona 32 veces la contrarrevolución, 26 veces se habla de ofensivas, 18 de milicias, 15 de luchar, 9 de combatir, 12 de armas, 10 de terrorismo, 9 de guerra, 8 de ejército, 7 de mercenarios, 8 de escoria, 4 de fusiles.
Si por un lado Fidel Castro intentaba minimizar a la oposición armada refiriéndose a esta siete veces como “grupitos” (de contrarrevolucionarios, de alzados, de mercenarios) por otra parte afirma que el imperialismo está movilizando “toda su escoria de decenas de miles de gangsters y de criminales”.
Con la prensa ya bajo su control Fidel Castro contaba con sacarle el jugo a cada mártir que produjera su temeraria decisión de enviar miles de alfabetizadores en su doble función de maestros y servicio de inteligencia. Y en efecto, seis de ellos (Conrado Benítez García, Modesto Serrano Rodríguez, Tomás Hormiga García, Delfín Sen Cedré, José Taurino Galindo Perdigón y Manuel Ascunce Doménech) fueron asesinados por los alzados: pocos si se contrasta con la situación en que se les había puesto a los alfabetizadores o si se los compara con los 95 campesinos fusilados por las guerrillas antibatistianas por supuestas delaciones.
A la larga la operación tuvo un éxito aplastante: no solo porque se logró reducir el analfabetismo de un 22% a un 3% sino porque una campaña de tan criminal temeridad sigue considerándose modelo educativo para todo el planeta. Recuerdo que hacia el año 2000 hablaba con una pareja de ecuatorianos cuando el hombre me puso una vez más como ejemplo el dichoso caso de la alfabetización. Pero antes de poderle responderle la ecuatoriana le recordó a su compatriota que en Ecuador se había eliminado el analfabetismo por completo hacía tiempo sin necesidad de hacer una revolución. Ni de mandar a nadie a morir, habría añadido yo, pero no era cosa de ensañarse cuando hasta su compatriota le había quitado la razón.
A estas alturas del juego, cualquiera que siga justificando al totalitarismo castrista con el cuento de la medicina (tercermundista) y el adoctrinamiento llamado educación "gratis" merece, por lo menos, que se le escupa en la cara.
ResponderEliminarsigue considerándose modelo educativo para todo el planeta, Bernie Sanders entre los crédulos. Eso y el sistema de salubridad, de lo mejor mundialmente, el COVID-19 doesn't stand a chance in Cuba.
ResponderEliminarSaludos