Cuando grabas a los compañeros que te atienden, como ha hecho el fotógrafo cubano Javier Caso (hermano de la actriz Ana de Armas) durante el interrogatorio que le hicieran dos agentes de la Seguridad del Estado (uno de ellos supuestamente teniente coronel) estos resultan más absurdos, ridículos, torpes y matones que como uno se lo imaginaría en la peor de las caricaturas.
Gracias a esta grabación tenemos pruebas de:
-Que los policías cubanos se creen que pertenecen a uno de los cinco mejores cuerpos policiacos del mundo.
-Que creen que la ley los autoriza a amenazar y chantajear a quien quieran.
-Que en Cuba hay una sola institución (la Seguridad del Estado).
-Y dentro de la institución todo y fuera de la institución nada.
-Y por tanto es la Seguridad del Estado la que decide quién es artista.
-Que creen que en el resto del mundo se necesita de una licencia para ser artista.
-Que pretenden que Cuba es un país normal pero de alguna forma tienen conciencia de que "Cuba is different".
Impresionante la manera de resumir 60 años de historia de un país en apenas once minutos.
Gracias a esta grabación tenemos pruebas de:
-Que los policías cubanos se creen que pertenecen a uno de los cinco mejores cuerpos policiacos del mundo.
-Que creen que la ley los autoriza a amenazar y chantajear a quien quieran.
-Que no entienden la diferencia que existe entre ley y terrorismo: "[si no te gusta] Cambia la ley. Sube para la Sierra con un fusil".
-Que la Seguridad del Estado recluta ninjas en sus filas.-Que en Cuba hay una sola institución (la Seguridad del Estado).
-Y dentro de la institución todo y fuera de la institución nada.
-Y por tanto es la Seguridad del Estado la que decide quién es artista.
-Que creen que en el resto del mundo se necesita de una licencia para ser artista.
-Que pretenden que Cuba es un país normal pero de alguna forma tienen conciencia de que "Cuba is different".
Impresionante la manera de resumir 60 años de historia de un país en apenas once minutos.
Se trata de gentuza baja y mezquina a la cual se le ha dado un pretexto oficialmente válido para ser lo que es y sentirse importante y hasta formidable. Por supuesto, siempre hay tal elemento disponible, lo mismo en Cuba que en cualquier lugar, sobre todo cuando las condiciones se prestan para que aflore. La misma mierda de gente existía antes de 1959, pero estaba obligada a fingir ser gente normal y más o menos decente. El castrismo sencillamente destapó la podredumbre y le dió rienda suelta. Si alguna vez Cuba vuelve a ser un país normal, ese tipo de gente volverá al closet pero nunca, nunca faltará. Todo es cuestión de circunstancias y lo que permiten o no permiten.
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