El otro día el ministro de cultura Abel Prieto, interrogado sobre recientes “deserciones” dijo que creía que "con excepción quizás de uno o dos de los bailarines del Ballet Nacional que se quedaron en Canadá (…) todo lo demás realmente no tiene a mi juicio el menor valor para la cultura cubana". Luego añadió que "Hace muchos años que no hay una verdadera figura de la cultura cubana que decide quedarse fuera de Cuba". El primer impulso cuando uno lee algo así es rezar porque nadie tenga esa declaración en video y se le ocurra colgarla en su blog porque cuando Abel Prieto habla de cuerpo presente como si fuera poco escuchar lo que dice además hay que dispararse el peinado. El segundo impulso es preguntarse cómo un ministro, novelista en sus ratos libres (gracias a Dios porque si lo fuera a tiempo completo no sé que sería de nosotros: un par de novelas más de Prieto dejarían chiquitos los efectos del calentamiento global) se atreve a dictaminar con tanta soltura qué vale y qué no vale para la cultura nacional. Pero claro, esos son impulsos irreflexivos. Si uno considera el asunto con calma concluiría que lo mejor sería recomendarle al ministro un barbero algo menos cruel que el que lo atiende actualmente y que posiblemente comparte con Kim Zong Il y con Oswaldo Payá. En serio, uno relee una frase como "hace muchos años que no hay una verdadera figura de la cultura cubana que decide quedarse fuera de Cuba" y se pregunta: ¿qué entiende Prieto por “verdadera figura de la cultura cubana”? ¿o por “muchos años”? ¿o por “Cuba”? Tan martiano es que a lo mejor se ha tomado al pie de la letra aquello de que “patria es humanidad” y hay que concederle hace muchos años que no hay una verdadera figura de la cultura cubana que haya decidido quedarse fuera de este planeta. Es que a los intelectuales cubanos la nostalgia por su Tierra los mata y no se hallan a gusto sin la fuerza de gravedad o sin oxígeno. Encima el ministro dice que los artistas no se van de Cuba por motivos políticos sino “buscando tener condiciones materiales de vida algo superiores”, supongo que en clara referencia a Silvio Rodríguez. Es que ahora Silvio luego de dar su gira por las cárceles llevándoles a los presos su música y por si fuera poco a Vicente Feliú, (un tipo que canta al tacto porque su voz es indetectable por el oído humano), Silvio, decía, ha decidido radicarse en Chile para inmenso regocijo de los presos cubanos. (No me tomen a mal los amantes de Silvio: seguramente a los presos les encantará escuchar al autor de Mariposas siempre que puedan devolverle la visita en su nueva residencia en Chile.) ¿Qué insinúa entonces Prieto? ¿Que Silvio no es una verdadera figura de la cultura cubana? ¿O que Silvio va a viajar al pasado para no despertar maledicencias de que en la contemporaneidad los artistas de valor no se quedan? ¿O que Chile es parte de Cuba? En cualquier no creo que Silvio vaya solo “buscando tener condiciones materiales de vida algo superiores”. Quizás tambien este interesado en nuevas técnicas de implantes de pelo. Pero claro, yo siendo Prieto, Preferiría no mencionar el tema del pelo.
P.D. #1. A los que crean que soy duro con Silvio léanse la última entrega de La lengua suelta en la que Fermín Gabor arremete contra el cantautor con bastante menos cariño que yo aunque coincidiendo con los puntos básicos de mi descarga del otro día. Como botón de muestra:
Mejor que introducirnos en esa cabeza que fue de bombillo cuando joven, que arrostró gafas y calvicie prematuras, y que hoy soporta gorra y tinte en lo que va quedando, será explicarlo a partir del público congregado por él. Fanáticos, gente que que conoció a César Vallejo pasado por el agua del cantautor cubano. Juventud tan malamente alimentada en lo musical como en lo digestivo, con libreta de la bodega para las orejas. Vestida toda igualita, con trapos y kicos salidos del círculo infernal del CAME. Tan diferenciados unos de otros como las literas de un albergue cañero. Rebajados así, intoxicados tan bárbaramente, ¿cómo no iban a idolatrar al poquita cosa de Silvio Rodríguez? ¡Un concierto suyo era más luminoso que la Noche de los Oscares! ¡Un concierto suyo equivalía a todos los partidos del Mundial de Béisbol! ¡A fajarse en la puerta, a empujar para llegar lo más alantico posible! ¡A pedirle “Mariposas”!
Se trataba de un público cautivo. El cantautor podría levantar la pierna donde su guitarra descansaba y tirarse un peo, que se lo aplaudirían como la última de sus genialidades. Y él despreciaba a aquella gente. Lo tragaban con gusto porque no había otra cosa, la escasez los convocaba frente a él. Se veía obligado a derramar sobre un montón de inertes las canciones de su heroísmo, malgastaba en puercos las perlas de su rebeldía.
Puede que, a la par, magnificara a quienes se interesaban por su música en el extranjero. Aunque esta hipótesis constituyera un flagrante error de cálculo, pues su arte necesitaba, dondequiera que se oyera, de circunstancias constreñidoras. En Cuba, de la censura musical y de más prohibiciones. En Chile o Argentina o España, de dictaduras de derecha.
¿Qué hubiera sido de Silvio Rodríguez sin las dictaduras latinoamericanas, incluyendo la cubana?
P.D. # 2. Y a los que crean que soy duro con Abel Prieto los convido a leerse su novela “El vuelo del gato”. Sospecho que concluirán que Prieto es para los lectores el equivalente de Carratalá para los antibatistianos, o del barbero del ministro con el propio ministro: la misma crueldad, el mismo sadismo.
Este ministro empezo bien; defendia a los artistas y hasta un dia se atrevio a rebatirle al Fifo.
ResponderEliminarPero desde que el gel se puso escaso en la Habana no hace mas que desvariar, tratando de justificar lo injustificable.
Llevo tiempo deciendolo: como puede ser ministro de cultura un tipo con ese peinado de cacatua chillona...
ResponderEliminarCaballeros! Ese peinado es de finales de los 70 y principio de los 80... Ese tipo no ve peliculas, ve revistas, viaja al extranjero?
Como un hombre tan ridiculo puede ser ministro de la cultura??????
O sera que hemos entendido mal y su cargo es: Cacatua de la Cultura!
estan ustedes como ellos, cuando hay que despotricar arremeten contra temas personales como el peinado, la inclinacion sexual o la vagancia. Nunca entenderemos los cubanos de que va la vida?
ResponderEliminarA bel prieto, tu calne de identidad... eso si que es un buen chiste
Mochita
Siempre he pensado que Fermín Gabor es genial! entre jodedera y verdades tiene toda la razón. En cuanto a Abel Prieto, como puede ser un escritor, ministro? como puede ser un ser sublime elegido por el don de la escritura, estadista, marioneta de un gobierno? aunque el gobierno fuera serio...un escritor es un artista y por consiguiente no va a la mano con el orden.
ResponderEliminarCaballones...y eso que vosotros no conoceis el companero profesor de sicologia que el tal abelito se espanta(ba) en su cama to las noches...Si lo conocieran, si lo comprendieran, jamas dudarian. Imaginense, que todos los anios se leia la carta del che en la UH, y toooodos los anios el tal companero profesor de sicologia lloraba a mares mientras se leia la misma. Al lado de ese social, abelito es toda una dama fina.
ResponderEliminarEnrisco, por casualidad, Carratalá solo era malo para los antibastitianos o era malo per se?
ResponderEliminarTe pregunto,¿qué opinas?
Usas cada símiles...!
yo me imagino que Carratala para Batista era buenisimo pero va y me equivoco. malo per se? nadie es malo per se. siempre lo es en relacion a algo. digo yo.
ResponderEliminarPor suerte para ti hablaste de Silvio en el post. Te juro que si de nuevo era mentira,me iba a encargar de secuestrar a tus niños y les iba a poner a ver toda la serie del payaso Ferdinando. No me imagino peor castigo para un mentiroso.
ResponderEliminarlo cual quiere decir que la segunda vez te volvi a coger. ja ja.
ResponderEliminarEn lo del oxígeno debe decirse "no se HALLAN a gusto". Estudiaron español en la escuela? Correción con todo respeto.
ResponderEliminargracias Machetico. a las tres de la mannana cuando escribo en esas cosas mi atencion ortografica no esta en su mejor momento. no solo estudie espannol sino que hasta me pagan por ensennarlo. es una verguenza lo que hacen con el dinero en este pais. por cierto, correccion va con dos "c".
ResponderEliminarA Abel Prieto lo ponen como ministro en un momento en que estan buscando colocar figuras "representativas" de determinados sectores de la sociedad para mostrarlos en una vitrina como maniquies o espejos donde creyeran reflejarse. Un ministro "peluo", un homosexual en el parlamento [Barnet] y un negro en el Buro Politico [Lazo] son algunos de las mas notorias marionetas. Tal es asi que Pi afirma que en defendia a los artistas y que incluso se atrevio a rebatirle al Fifo. Teatro, Pi, puro teatro; nadie le rebatia [pasado] al Fifo y quedaba al menos en el cargo para hacer el cuento. Todo bien preparadito y bien amarradito para que efectivamente los artistas e intelectuales se creyeran representados por Abelito, el peluo pitusero.
ResponderEliminarNadie mejor que un tipo con pretensiones de escritor para ser ministro de cultura, particularmente en un contexto como el cubano. El candidato perfecto. Una de las cosas que Fidel Castro sabia hacer muy bien era poner al tipo adecuado en el lugar correspondiente en el momento oportuno.
Por lo demas 100% de acuerdo con el analisis de Enrisco que se agradece y by the way con el peinado de KIm Zong Il.
LO de Silvio es mentira, lo publicó la agencia Hernández-Bustos Press.
ResponderEliminarY ese sí que está en la última.
La Marilyn Bodes citando a Amaurys esta diciendo que no es cierto lo de Silvio http://www.juventudrebelde.cu/opinion/2008-02-10/silvio-no-se-va-a-vivir-a-chile/
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