lunes, 2 de julio de 2007

De Venezuela me han dado un recado

Una colaboración que me envía un amigo venezolano sobre las facilidades que les dan a sus compatriotas cuando se trata de viajar a Cuba. Ante algo así se imponen dos conclusiones. Una que lo que ellos ven como dificultad ya lo quisieran los cubanos de Cuba aunque sólo sea (de momento) para viajar a Venezuela. La segunda, ahora que lo veo es más de lo mismo: ya quisieran los cubanos de afuera las facilidades para viajar a su país que hoy disfrutan los hermanos venezolanos.

Si quiere pasaporte vaya a Cuba
TalCual
Juan Pablo Arocha

Olvídese de los trámites burocráticos. El Ministerio de Finanzas ofrece financiamiento a 36 meses, tramitación de cupos para divisas en Cadivi y la emisión rápida del preciado documento a todo aquel que quiera visitar el mar de la felicidad. Para el común de los ciudadanos la planificación de los viajes se ha convertido en un calvario por culpa del pasaporte, pero para los trabajadores del Ministerio de Finanzas la tarea resulta sencilla. La agencia oficial Venezolana de Turismo (Venetur) puso a disposición de los funcionarios públicos toda su estructura para agilizar las diligencias en la emisión del preciado documento y los trámites de Cadivi para obtener dólares de viajero.Pero las facilidades son para un solo destino: Cuba.

Solicitar ante la Oficina Nacional de Identificación la emisión del pasaporte, se ha convertido en toda una aventura. Desde que se eliminó el viejo sistema del numerito que obligaba a madrugar y hacer colas durante semanas, los usuarios deben enfrentarse a la web para tentar a la suerte y lograr una cita a fin de tramitar el documento.

Se han registrado casos de hasta dos meses para lograr culminar el proceso de registro por Internet, lo cual enfrenta a los usuarios con el riesgo de no conseguir el pasaporte antes que se acabe la temporada de vacaciones.

Pero incluso en los casos en que hay suerte, viene a continuación un segundo calvario: la solicitud de dólares. Para este proceso debe librarse una batalla con el servidor de la página web de Cadivi, registrarse, enviar una planilla de datos, y esperar la respuesta oficial.

En el camino se corre el riesgo de que las divisas lleguen después que la fecha de viaje. Esto ha obligado a más de un usuario a partir sin dinero en el bolsillo. Como se ve, el turismo en tiempos de revolución es sencillo.Y para hacerlo aún más fácil, la “revolución” pone a disposición de los bolivarianos nuevos servicios.

“Vive la experiencia del turismo social”, es el encabezado de un comunicado
transmitido por la dirección de prensa del Seniat a todo su personal. El organismo, como parte del Ministerio de Finanzas, invita de este modo a sus trabajadores a disfrutar del Convenio turístico Venezuela-Cuba, el cual, desde su activación se viene desarrollando en una sola dirección:Venezuela- Cuba. De hecho, la ministra de Turismo Olga Cecilia Azuaje, anunció a principios de año la meta oficial de llevar 200 mil venezolanos a la isla antillana.

El disfrute comienza incluso antes de montarse al avión. La diligencia gubernamental hace olvidar al viajero todos los dolores de cabeza previos a la partida, que se derivan de la burocracia bolivariana.

Los trámites referentes a pasaportes son canalizados por Ventur a través del
Ministerio de Finanzas. Lo mismo ocurre con el otorgamiento del cupo de divisas para viajes, la solicitud de dólares u euros y la emisión de las tarjetas de crédito. Por si fuera poco, se ofrece el financiamiento a 36 meses para cancelar el costo del viaje.

El paquete turístico en la isla tiene un costo máximo de 2.618.700 bolívares. Están incluidas dos noches en La Habana y cinco en Varadero, así como el pasaje, todas las comidas, traslados, visitas guiadas, asistencia personalizada, impuestos y seguro médico.

La aerolínea prevista en el programa para llevar los turistas a la isla caribeña no es Aeropostal, ni Conviasa sino Cubana de Aviación. Los primeros funcionarios públicos que disfrutarán de este paquete de “turismo social” a Cuba, partirán el
27 de junio.

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