Acabo de ver "Conducta" la película de Ernesto Daranas que en estos días han estrenado en La Habana con sus aires de "Nuestros hijos", actuaciones más o menos previsibles (qué fácil les queda a los actores cubanos y sobre todo a las actrices esos mohínes de disgusto) y ese coqueteo constante con la solución sentimentalona. Pero de todo eso lo salva la dignidad del director- guionista, la de la profesora Carmela, la de la actriz que la encarna Alina Rodríguez, la de todos los niños, la de las vidas -nada peliculeras- que no se resignan a disolverse en la mierda que las rodea. Es difícil no querer a un país tan jodido aunque sólo sea por la convicción de que nadie lo va a hacer por uno.
Bro:
ResponderEliminarNo he visto la peli pero respecto al carinno queria pedirte que tu tambien lo quisieras por mi. Yo hace mucho tiempo que no puedo.
Un abrazote,
yoi
Vi la pelicula y me conmovio. Es tan mala como Dead Poet Society asi que la unica explicacion que tiene el hecho de que me haya conmovido es que algo de esa maldita isla todavia me toca. Parece que no te vas a tener que hacer responsable de la cuota de carinno que me corresponde.
ResponderEliminarUn abrazote,
Yoyi
La pelicula esta malisima, desde el punto de vista cinematografico, sin embargo, la realidad que denuncia hace que nos conmueva a muchos cubanos.
ResponderEliminarNo, nadie lo va a hacer por uno, igual que nadie aparte de los cubanos hará gran cosa por sacar a Cuba del hueco (y muchos cubanos no harán nada tampoco).
ResponderEliminarPero hay cierta justicia en el asunto: Cuba se hundió principalmente por culpa de su propia gente, y los ajenos al caso no tienen obligación de resolver ese problema.