El corresponsal de El País en Miami lucha a brazo partido por convertirse en el Mauricio Vicent del norte. En la edición de hoy Juan José Fernández se inventa este titular: “El exilio cubano se harta de Obama”. Esas son sus conclusiones sobre la renuncia del congresista Lincoln Díaz Balart a aspirar a un nuevo término. A una especulación suya -a la que no se han atrevido ni el Washington Post ni The New York Times- le da el estatus de noticia. Igual que cualquier cliente del Versailles con la diferencia que los viejitos se limitan a soltarlo en el mostrador mientras se inoculan su dosis diaria de cafeína. Mucho más justo sería este titular: “Los viejitos del Versailles se hartan de Obama y de café”.
“El exilio intransigente” dice Mr. Fernández como el Granma adjetivaría “cavernícola”. Y seguro que es tan intransigente como aquél exilio español de ciudad México, Buenos Aires o París, para no hablar del de Moscú. Pero ¿Alguna vez llamaron “intransigente” a La Pasionaria como se habla de los miembros de alguna secta empeñada en curar el adulterio a pedradas? Todo exilio es por definición intransigente o si no ¿para qué insiste llamarse “exilio” y no “emigración”? Quizás si se insiste en el dichoso adjetivo es para distinguirlo, por ejemplo, del exilio en el cielo con Cucú Diamantes.
Y la verdad es que Lincoln Díaz Balart no es santo de mi devoción pero esa insinuación habitual de que pedir democracia para Cuba en términos algo más duros que los de Moratinos es cosa de fanáticos me parece insultante. Sobre todo para los verdaderos fanáticos que bastante empeño ponen en serlo.
“El exilio intransigente” dice Mr. Fernández como el Granma adjetivaría “cavernícola”. Y seguro que es tan intransigente como aquél exilio español de ciudad México, Buenos Aires o París, para no hablar del de Moscú. Pero ¿Alguna vez llamaron “intransigente” a La Pasionaria como se habla de los miembros de alguna secta empeñada en curar el adulterio a pedradas? Todo exilio es por definición intransigente o si no ¿para qué insiste llamarse “exilio” y no “emigración”? Quizás si se insiste en el dichoso adjetivo es para distinguirlo, por ejemplo, del exilio en el cielo con Cucú Diamantes.
Y la verdad es que Lincoln Díaz Balart no es santo de mi devoción pero esa insinuación habitual de que pedir democracia para Cuba en términos algo más duros que los de Moratinos es cosa de fanáticos me parece insultante. Sobre todo para los verdaderos fanáticos que bastante empeño ponen en serlo.
Como dice el refrán:
ResponderEliminarDime de quién son los güevos, y te diré como son sus ladillas.
El País...
¡Bravo!!!
ResponderEliminarNo me explico como EL PAIS tiene a un tipo tan mediocre como corresponsal. No he leido una sola nota que sirva, es como si viviera en Michigan y escribiera de Miami. Deben estar pagando muy poco. Me imagino que sus jefes en Madrid deben saber lo que estoy diciendo.
ResponderEliminarMe gustaria que el Sr. Fernandez nos dijera si los exiliados de la Republica fueron transigentes con Franco!
ResponderEliminarY también insinúa que pasa al sector privado para ganar más dinero con su lucha. Y cuestiona el uso del calificativo de "tiranía" asociado al régimen... lamentable
ResponderEliminarMe ha gustado mucho esa observación de Enrisco. La hallo muy pertinente. Desde hace tiempo vengo percibieno esa tendencia creciente a la mezcla de info con op ed en El País, muy especialmente con relación a la crisis de Honduras. Sobre Cuba viene desde antes, naturalmente. Para colmo, en la edición en papel últimamente han aparecido en primera plana llamadas a artículos de opinión (que deben aparecer por regla en páginas interiores). Recuerdo, p. ej., uno de Cebrían que se anunciaba en primera. Gracias, Enrisco. ---- NIC
ResponderEliminarJJ Fernández vive en un apartamento de los rascacielos de Brickell y solía escribir sobre bamolpié.
ResponderEliminarLa verdad es que te pones a decirle cosas a JJF y sí que eres mucho más insidioso que el articulísta del País en Miami. Brother, mira que estamos hablando de una de las personas que más daño, más obstáculos y empeño ha puesto en una supuesta relación familiar entre cubanos.
ResponderEliminarA nombre de la libertad de Cuba, estos hermanitos (los políticos) a los que sus parientes los Castro exiliaron, herederaron una guerrita que han ido inoculando durante todo el medio siglo de huida que acopian. 40 Millones de Doláres para ayudar a los disidentes!!!! jajajajajajajajajajajajajajajajajajaja
Cuando miras ciertos datos, oye, mira se cagó el dinerito a Encuentro y toda la historia; estos sí que son grandes ligas. Y por si fuera poco, te bajan el cuento del pundonor y se ponen como ejemplo para unos pocos tratacatanes, que por necesidad, más que por convicciones, se las dan de sus amiguitos.
Bien hace el Congresísta yanqui en soltar su cargo, que ahí lo escuchaban menos que a un mudo en el Benabeu. Pronto vendrá la señora Ileana de aquél apellido. Ley de vida, son una mentalidad fracasada, resultado de la pérdida que heredaron, te repito.
Nada tiene el futuro de Cuba que ver con estos señores, puedes estar seguro. Te juro que lo sueltas a dar un discurso en La Habana y no lo entienden, en el mejor de los ejemplos.
Un abrazo.
Ch
Enrisco, diáfano y al hueso, como siempre, tu comentario.
ResponderEliminarEnrisco, diáfano y al hueso tu comentario. No sé qué virus tiene El País contra nuestro país. es una enfermedad patológica.
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